El Banco Mundial ha publicado su informe actualizado sobre las Perspectivas Económicas Globales, anticipando una estabilización de la economía mundial en 2024 con un crecimiento esperado del 2.6%, impulsado principalmente por Estados Unidos. Sin embargo, las economías de bajos ingresos enfrentan una recuperación lenta, plagada de desafíos como la deuda, el cambio climático, y conflictos.
El Impulso Inesperado de Estados Unidos
Según Indermit Gill, economista jefe del Banco Mundial, el crecimiento económico de Estados Unidos ha superado las expectativas, contribuyendo significativamente a las perspectivas globales mejoradas. A pesar de la inflación que se mantiene más de un punto por encima del objetivo del 2%, la economía estadounidense continúa mostrando resistencia y es un motor clave para el crecimiento global.
Preocupaciones para las Economías en Desarrollo
Las economías en desarrollo, y en particular las de bajos ingresos, no muestran signos de un desempeño alentador. Ayhan Kose, responsable del grupo de perspectivas del Banco Mundial, destaca que el 60% de estos países experimentarán un crecimiento más débil que antes de la pandemia, afectando al 80% de la población global. Este año, se espera que un cuarto de todas las economías en desarrollo sean más pobres que antes del brote de COVID-19.
Repunte Modesto en la Eurozona y Japón
En Europa, la eurozona espera un crecimiento del 0.7% en 2024, mejorando levemente respecto al año anterior. Se anticipa que este crecimiento se acelere en los próximos años, apoyado por un sector servicios robusto y un aumento en el consumo de los hogares. Japón, por su parte, muestra tendencias de crecimiento similares, con expectativas de mejora moderada hasta 2026.
Perspectivas para América Latina
Latinoamérica sigue enfrentando desafíos para recuperar el nivel de crecimiento pre-pandemia. Se proyecta un crecimiento del 1.8% para 2024, con expectativas de una mejora a 2.7% en 2025, impulsado por la estabilidad en economías claves como Brasil y México, y una recuperación esperada en Argentina.
El informe del Banco Mundial refleja una mezcla de estabilización y desafíos persistentes. Mientras Estados Unidos impulsa el crecimiento global, las economías en desarrollo luchan contra adversidades estructurales y externas. Los próximos años serán cruciales para determinar si las mejoras actuales pueden convertirse en un impulso sostenido para el crecimiento global o si las economías más vulnerables seguirán rezagadas.
12/6/2024