El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha lanzado una grave advertencia sobre el incremento del 130% en la violencia contra los niños en la región del Sahel central durante el último trimestre de 2023. Las zonas más afectadas incluyen Burkina Faso, Mali y Níger, donde los menores están siendo asesinados, secuestrados y reclutados por grupos armados.
Gilles Fagninou, director regional de UNICEF para Asia Occidental y Central, destacó la urgente necesidad de proteger a los civiles, especialmente a los niños, quienes son víctimas de violaciones flagrantes de sus derechos. “Estos niños sufren en un contexto de combates intensos, y es esencial que cesen estas violaciones para que puedan vivir en seguridad y paz”, señaló.

La situación de seguridad en el Sahel central es extremadamente volátil, con ataques frecuentes contra civiles exacerbados por tensiones políticas y un aumento de las necesidades humanitarias. Entre los incidentes recientes, destacan la muerte de más de 220 civiles, incluidos 56 niños, en Burkina Faso y el secuestro de 110 civiles en Mali, ilustrando la escalada de la crisis.
UNICEF hace un llamado urgente a todas las partes involucradas en el conflicto para poner fin a todas las formas de violencia y abuso contra niños, conforme a las obligaciones internacionales como la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño y la Carta Africana sobre los Derechos y el Bienestar del Niño. Además, insta a la comunidad internacional a reforzar los esfuerzos para garantizar la protección de los menores en las zonas de conflicto, alineándose con la resolución 1612 del Consejo de Seguridad de la ONU, que identifica las seis violaciones graves contra los niños en conflictos armados.
Esta situación crítica subraya la importancia de una respuesta coordinada y efectiva para asegurar el cese de la violencia y el apoyo sustancial a las víctimas de estos atroces crímenes.
31/5/2024