La ley de amnistía, que busca normalizar institucional, política y socialmente la situación en Cataluña, está a punto de ser aprobada definitivamente este jueves tras seis meses de tramitación en las Cortes. La norma, que ha generado intensos debates y un conflicto de atribuciones entre el Congreso y el Senado impulsado por el PP, finalmente procederá a votación en el Congreso con el apoyo mayoritario de partidos como PSOE, Sumar, ERC, Junts, Bildu, PNV, Podemos y BNG. La aprobación se dará en el contexto de la campaña para las elecciones europeas del 9 de junio.
La ley, que excluye delitos graves como el terrorismo o la traición, y los de corrupción con enriquecimiento personal, beneficiará a más de 370 personas encausadas por el «procés» catalán, incluyendo a Carles Puigdemont, líder de Junts y fugado desde 2017. La negociación de la ley ha enfrentado numerosos obstáculos, especialmente en delimitar los delitos que quedarían excluidos de la amnistía.

Después de varias enmiendas y debates, y superando la oposición de partidos como el PP y Vox, el gobierno de coalición logra avanzar con esta ley, la segunda aprobada en esta legislatura tras la de Enseñanzas Artísticas Superiores. A pesar de los apoyos, partidos independentistas como ERC y Junts advierten que esta amnistía no representa un punto final, sino el inicio de nuevas reivindicaciones.
Esta ley, crucial para la dinámica política actual en España, también podría enfrentarse a desafíos legales ante el Tribunal Constitucional, anticipados por el PP.
26/5/2024