Las intensas lluvias en el sur de Brasil han dejado un saldo devastador, con más de 1,7 millones de personas afectadas, 107 fallecidos y 134 desaparecidos, agravando la situación en el estado de Río Grande del Sur. Las inundaciones han impactado principalmente en zonas densamente pobladas y ciudades como Porto Alegre, causando daños significativos y forzando a miles a abandonar sus hogares.
La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) se ha movilizado para asistir en las labores de respuesta, colaborando estrechamente con autoridades federales, estatales y municipales, y otros organismos humanitarios. Esta cooperación busca mitigar los efectos de estos fenómenos meteorológicos, que se han intensificado por el cambio climático y la presencia del fenómeno de El Niño.

ACNUR está proporcionando apoyo técnico y distribuyendo insumos esenciales como mantas y colchones para enfrentar el frío otoñal. Además, se está enfocando en las necesidades específicas de aproximadamente 41,000 refugiados y solicitantes de asilo en la región, incluidos muchos venezolanos y haitianos, que viven en áreas ahora inaccesibles excepto por barco.
Entre las medidas de apoyo, ACNUR facilitará la emisión de documentos esenciales que se hayan perdido o dañado y colaborará con organizaciones locales para proporcionar asistencia psicológica y atender a los casos más vulnerables. Además, se están enviando suministros adicionales desde reservas regionales para responder a las necesidades inmediatas.
La situación en Río Grande del Sur es particularmente crítica, con más del 85% de su territorio inundado y aproximadamente 68,000 personas refugiadas en albergues temporales. La previsión meteorológica indica que las lluvias intensas, acompañadas de vientos fuertes, continuarán durante el fin de semana, exacerbando los desafíos para las labores de rescate y asistencia.
ACNUR también ha lanzado un llamamiento de fondos, estimando que se requieren 3.21 millones de dólares para cubrir las necesidades más urgentes, que incluyen asistencia financiera directa a los afectados y provisión de artículos de socorro indispensables.
Estos eventos subrayan la vulnerabilidad de los refugiados y desplazados ante fenómenos climáticos extremos y la necesidad de fortalecer la resiliencia frente al cambio climático y sus impactos. ACNUR, en su compromiso con la protección de los más vulnerables, continúa trabajando para asegurar que la asistencia y recuperación en situaciones de emergencia sean efectivas y equitativas.
10/5/2024