En una serie de eventos trágicos y poco comunes dentro de las dependencias policiales, dos oficiales fueron gravemente heridos en un tiroteo ocurrido en la comisaría del 13º distrito de París. El incidente se desencadenó la noche del jueves 9 de mayo cuando un hombre, inicialmente detenido por agredir a una mujer con un cutter, logró arrebatar el arma de un policía y abrió fuego dentro de la comisaría.
El ataque tuvo lugar poco antes de las 22:30, desatando instantes de pánico y urgencia dentro de las instalaciones policiales. El prefecto de policía de París, Laurent Nuñez, junto a la fiscal Laure Beccuau, se presentaron en el lugar cerca de la medianoche para supervisar la situación y brindar un informe preliminar a la prensa. Nuñez describió el ataque como «una agresión extremadamente violenta», y destacó la rápida respuesta de los agentes involucrados.

Los oficiales heridos fueron trasladados inmediatamente a un hospital local, donde uno de ellos fue reportado en estado crítico. El agresor, también herido gravemente en un intercambio de disparos de represalia, fue igualmente hospitalizado, aunque su vida no está en peligro. La gravedad del suceso ha generado una honda preocupación entre las autoridades y la comunidad, pues ataques de esta naturaleza en instalaciones policiales son extremadamente raros y señalan potenciales fallos en la seguridad interna.
En respuesta al tiroteo, el parquet de París ha iniciado tres investigaciones paralelas para esclarecer completamente los eventos y circunstancias que condujeron a este grave incidente. Una de estas investigaciones está siendo llevada a cabo por la IGPN, conocida como la ‘policía de las policías’, que se encargará de evaluar el uso del arma de fuego por parte del agente bajo cuyo control estaba el arma substraída.
Este incidente subraya la peligrosidad que enfrentan los agentes de policía en su labor diaria y plantea preguntas urgentes sobre las medidas de seguridad en las comisarías, así como los protocolos de manejo de armas y detenidos. El soporte y la solidaridad hacia los agentes afectados se han hecho evidentes, destacando el coraje y la dedicación de los miembros de la policía parisina frente a situaciones de alto riesgo. Las autoridades han asegurado que se tomarán todas las medidas necesarias para fortalecer la seguridad y evitar que incidentes de esta naturaleza vuelvan a ocurrir. (Le Croix)
10/5/2024