La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha expresado su preocupación por el «uso excesivo de antibióticos» a nivel mundial entre pacientes hospitalizados por COVID-19, lo cual no solo no mejoró los resultados clínicos, sino que también exacerbó la amenaza de la resistencia a los antimicrobianos causada por las «superbacterias».
El viernes, la OMS emitió una alerta donde destacó que, aunque solo el 8% de los pacientes hospitalizados por COVID-19 también tenían infecciones bacterianas que requieren tratamiento con antibióticos, al 75% se les administraron estos medicamentos «por si acaso». La agencia sanitaria de la ONU nunca recomendó antibióticos para tratar el coronavirus, subrayó la Dra. Margaret Harris, portavoz de la OMS.

La organización puntualizó que el uso de antibióticos durante la pandemia osciló entre el 33% en la región del Pacífico Occidental y el 83% en el Mediterráneo Oriental y África. Entre 2020 y 2022, las prescripciones disminuyeron en Europa y América, pero aumentaron en el continente africano.
Según datos de la OMS, la mayoría de los antibióticos se suministraron a pacientes con COVID-19 gravemente enfermos, con un promedio global del 81%. El uso en casos leves o moderados varió considerablemente, siendo más alto en África con un 79%.
Alarmantemente, los antibióticos más frecuentemente recetados en todo el mundo fueron aquellos con alto potencial de generar resistencia antimicrobiana. «Cuando un paciente necesita antibióticos, los beneficios generalmente superan los riesgos de efectos secundarios o resistencia. Pero cuando son innecesarios, no solo no aportan beneficios, sino que también conllevan riesgos y contribuyen al desarrollo y propagación de la resistencia», explicó la Dra. Silvia Bertagnolio, jefa de la Unidad de Vigilancia y Pruebas de la División de Resistencia a los Antimicrobianos de la OMS.
El uso indiscriminado de estos medicamentos «no mejoró los resultados clínicos de los pacientes con COVID-19», afirmó la agencia, y advirtió que su prescripción sistemática «podría ser perjudicial para las personas sin infección bacteriana en comparación con las que no recibieron antibióticos».
La OMS insta a mejorar el uso racional de los antibióticos para minimizar las consecuencias negativas innecesarias tanto para los pacientes como para la población en general. Las conclusiones del informe se basan en datos recopilados por la Plataforma Clínica Mundial para la COVID-19, que incluye información clínica anónima de 450.000 pacientes hospitalizados en 65 países desde enero de 2020 hasta marzo de 2023.
26/4/2024