En marzo, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) en España registró un aumento hasta el 3,2% interanual, incrementándose cuatro décimas respecto al mes anterior. Este ascenso se debe principalmente a la subida en el costo de la electricidad, tras el incremento del IVA de este servicio del 10% al 21%. Paralelamente, la inflación de los alimentos experimentó una reducción, situándose en el 4,3%, la tasa más baja en más de dos años, según confirmó el Instituto Nacional de Estadística (INE).

El análisis detallado muestra que el aumento del IPC fue influenciado por varios sectores. El grupo de vivienda, que incluye la electricidad, experimentó un notable aumento de 4,2 puntos hasta alcanzar un 1,5% interanual. Asimismo, el sector de ocio y cultura ascendió un punto hasta el 3,8%, impulsado en gran medida por el encarecimiento de los paquetes turísticos. En contraste, el grupo de alimentos y bebidas no alcohólicas presentó una disminución en su tasa debido a la caída de los precios de legumbres y hortalizas, entre otros productos alimenticios.
A pesar de estos aumentos, algunos productos como el aceite de oliva destacaron por un incremento significativo en sus precios, siendo un 70% más caro que el año anterior. Además, en términos mensuales, el IPC subió un 0,8% respecto a febrero, marcando el mayor aumento mensual desde febrero de 2023, con un impacto notable en sectores como vivienda, ocio y cultura, y transporte, este último influenciado por el aumento en los precios de los combustibles y lubricantes para vehículos personales.
12/4/2024