Según recoge el diario El Obrero, la popularidad del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha experimentado un notable descenso, cayendo casi 30 puntos porcentuales desde febrero de 2023, según un sondeo reciente del grupo sociológico ‘Rating’. Esta caída, que ha dejado el índice de aprobación de Zelenski en un 63%, parece haber comenzado en octubre, posiblemente como resultado de la decepción por los resultados de la contraofensiva de verano de Ucrania. La situación se agravó con el cese del comandante en jefe Valeri Zaluzhni en febrero, un líder militar que había encarnado las victorias tempranas de Ucrania y que gozaba de la confianza del 94% de la población.
Volodímir Paniotto, presidente del Instituto Internacional de Sociología de Kiev, sugiere que el futuro apoyo a Zelenski dependerá en gran medida de los acontecimientos en el campo de batalla. A pesar de la caída, la mayoría de los ucranianos aún mantienen una «confianza estable» en su presidente. La decisión de aplazar las elecciones presidenciales debido a la ley marcial ha encontrado un amplio respaldo entre la población, con más del 80% apoyando la medida para evitar elecciones en tiempo de guerra, lo que refleja un fuerte apoyo a la democracia a pesar de la invasión rusa.
En el ámbito político, Zelenski parece estar navegando cuidadosamente las aguas sociopolíticas, retrasando posiblemente el cese de Zaluzhni para evitar la creación de un potente rival político. Aunque Zaluzhni no ha mostrado interés en entrar en la arena política tras su nombramiento como embajador en el Reino Unido, la tensión política ha resurgido con figuras como el alcalde de Kiev, Vitali Klitschkó, expresando preocupaciones sobre la dirección del país. A pesar de las críticas, el expresidente Petró Poroshenko ha indicado su intención de participar en futuras elecciones, aunque las perspectivas para los «viejos políticos» parecen limitadas sin la incorporación de caras nuevas que puedan revitalizar su apoyo.
Este panorama político en Ucrania muestra una compleja mezcla de lealtad hacia el liderazgo de Zelenski, preocupaciones sobre la democracia y el potencial de cambio político. Aunque la guerra y sus desafíos han mermado la popularidad de Zelenski, la resistencia y la unidad nacional frente a la agresión rusa siguen siendo fuertes. La sociedad ucraniana, claramente alineada contra la posibilidad de elecciones durante el conflicto, muestra una resiliente preferencia por la estabilidad y la continuidad democrática, mientras se prepara para el futuro político del país en un contexto de incertidumbre y desafío.
8/4/2024
