El ejército nigeriano declaró el lunes que no ha llevado a cabo ningún ataque de represalia en el Estado del Delta (sur), después de que los residentes afirmaran que unos hombres habían incendiado un pueblo en respuesta a la muerte de 16 militares durante el fin de semana.
«El ejército niega todas las acusaciones según las cuales se habrían lanzado ataques de represalia en la comunidad de Okuama tras el incidente. La comunidad ya estaba desierta incluso antes de que las tropas llegaran al lugar», indicó en un comunicado el mayor general y portavoz del ejército nigeriano, Edward Buba.

En las redes sociales, desde el domingo circulan imágenes de casas en llamas supuestamente ubicadas en Okuama, un pueblo en el Estado del Delta a lo largo del río Forcados.
Aquellos que comparten las imágenes acusan al ejército de haber incendiado el pueblo como una venganza por el asesinato el 14 de marzo de 16 militares.
En su comunicado, el general Buba asegura que la respuesta del ejército será «mesurada» y que no se dejará guiar por las emociones, sino por el estado de derecho.
El sábado, el ejército nigeriano había anunciado la muerte de 16 militares, asesinados el 14 de marzo mientras estaban desplegados en una misión de conciliación entre las comunidades de los dos pueblos vecinos de Okuama, de etnia Urhobo, y de Okoloba, de etnia Ijaw. 18/03/2024









