
A lo largo de más de medio siglo, el vínculo de Marruecos con la Unión Europea ha evolucionado, enfrentando desafíos ocasionales. La reciente asistencia financiera europea, un apoyo crucial tras el terremoto de Al Hauz, subraya la firmeza de esta asociación, centrada en desafíos compartidos como el desarrollo económico, la migración y el cambio climático.
Pero la influencia de Marruecos va más allá en la escena global, evidenciada por su elección para presidir el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Este reconocimiento internacional refleja las reformas impulsadas por el Reino en derechos humanos, consolidando su posición multilateral y desacreditando afirmaciones infundadas.
En este contexto dinámico, Redouan Bachiri, actor económico y experto en relaciones internacionales, aporta en una entrevista exclusiva con «Marruecom.com» su visión penetrante, proporcionando una mirada profunda y enriquecedora sobre los retos y oportunidades que caracterizan la intersección de Marruecos con la Unión Europea y el escenario internacional. Expone su perspectiva crítica sobre la falta de institucionalización del papel de la diáspora, planteando preguntas importantes sobre su reconocimiento y participación política.
P: Siendo experto en relaciones internacionales, ¿cómo evalúa las actuales y futuras relaciones entre Marruecos y la UE en medio de los cambios estratégicos ocurridos en África, Europa y Oriente Medio?
R: Marruecos y la Unión Europea mantienen relaciones desde hace más de medio siglo. A lo largo de los años, las bases de esta asociación se han visto fortalecidas, a pesar de algunos pequeños obstáculos ocasionales. Ejemplo de ello es la reciente adopción de una asistencia de apoyo presupuestario (177 millones de euros), por parte de la Comisión Europea, para respaldar el programa de reconstrucción (2024/2028), elaborado por las autoridades marroquíes, a raíz del terremoto de Al Haouz.
Desde la llegada del Rey Mohammed VI al trono, el país ha adoptado una política clara, que comenzó con la constitucionalización del Consejo Nacional de Derechos Humanos y la resolución de los casos más graves, vinculados a las violaciones del Estado de derecho
Radouan Bachiri
Por tanto, el vínculo entre Europa y el Reino se centra en desafíos comunes, tales como el desarrollo económico, la migración, la seguridad, la innovación, el cambio climático y la buena gobernanza. De hecho, desde 2004, han establecido una estrecha colaboración en materia de migración, obteniendo resultados positivos en la gestión de fronteras. Además, en 2022 negociaron un nuevo programa de apoyo presupuestario en el mismo ámbito, con una asignación de 152 millones de euros para un periodo de cuatro años. En el mismo año, también consolidaron su cooperación en la protección del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático, con el lanzamiento del primer partenariado verde que la Unión Europea firma con un país asociado.
Por otra parte, aunque en 2020, el comercio experimentó una disminución, como consecuencia de la pandemia, posteriormente, mejoró en un 23% en 2021, en comparación con el año anterior y aproximadamente, un 10%, con respecto al año previo a la crisis. Así pues, la Unión Europea sigue siendo el principal proveedor y cliente de Marruecos.
Es igualmente necesario señalar que la nueva dinámica en las relaciones entre ambas partes se enmarca en la implementación de la declaración política conjunta, adoptada en 2009, que consolidó la confianza mutua, los intereses y los valores comunes. En este sentido, Europa es muy consciente de que Marruecos es uno de los mejores socios estratégicos, después de haber acumulado éxitos en diversos ámbitos (seguridad, innovación, deporte y derechos humanos…).
Desafortunadamente, he de decir, también, que el año pasado las relaciones se vieron afectadas por falsas acusaciones, principalmente en el marco de las denuncias de escuchas telefónicas y el caso Qatargate. No obstante, este puntual malentendido no afectó las sólidas asociaciones comerciales. Considero que es cosa del pasado y que el futuro será mejor en los próximos meses, tras los cambios que se producirán en las instituciones europeas, tras las elecciones, programadas para junio de 2024.
P: ¿Cómo ve la elección de Marruecos para la presidencia del CDH de la ONU?
R: Desde la llegada del Rey Mohammed VI al trono, el país ha adoptado una política clara, que comenzó con la constitucionalización del Consejo Nacional de Derechos Humanos y la resolución de los casos más graves, vinculados a las violaciones del Estado de derecho. Las dos iniciativas anteriores permitieron el fortalecimiento del estatus constitucional de los derechos y las libertades.

Así pues, la presidencia del CDH presenta un reconocimiento internacional a las reformas emprendidas por Marruecos en el ámbito de los derechos humanos, en particular desde la adopción de la Constitución de 2011. Es un reconocimiento de la posición que ocupa en la esfera multilateral, confirmando sus logros.
Por otra parte, además de ser un guiño de confianza, otorga aún más crédito a la diplomacia marroquí y a su política exterior, desmintiendo contundentemente el argumento utilizado por Argelia, que afirmaba que Marruecos no ratificó la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos.
P: Marruecos acogerá la Copa de África 2025 y la del Mundo en 2030 con España y Portugal. ¿Cree que el país es capaz de organizar estos dos eventos tan importantes?
R: Marruecos es un país que ha acumulado una experiencia significativa en la organización de eventos internacionales. El más reciente tuvo lugar en octubre de 2023 en Marrakech, cuando acogió las “Asambleas Anuales del Grupo del Banco Mundial y el FMI”, marcando el regreso de éstas al continente africano, después de 50 años. De hecho, participé personalmente en este “megaevento” y pude constatar la excelente capacidad de organización y profesionalismo de los marroquíes. Por tanto, estar al frente de este inmenso acontecimiento deportivo internacional supone una continuación del prestigio que ha ganado tras el histórico logro del equipo nacional en la Copa del Mundo de Qatar.
En esta línea, el liderazgo del país como anfitrión, llevando a cabo un buen trabajo diplomático y manteniendo la seguridad en la región, aumentará la confianza global en el Reino y en su capacidad para gestionar más eventos. Además, también supondrá un aliciente importante en los esfuerzos destinados a resolver conflictos y crisis políticas en la región.
La labor desempeñada por esta importante comunidad se impulsa por el sentimiento innato de pertenencia a la patria y el deseo apasionado de contribuir de manera espontánea al desarrollo del país
Radouan Bachiri
Sin lugar a dudas, cabe añadir que la organización de la Copa del Mundo tendrá un impacto considerable en el desarrollo local y nacional, fomentando la implementación de reformas económico-sociales y estimulando, aún más, las inversiones en el país.
P: ¿Cree que los Marroquíes Residentes en el Extranjero desempeñan un papel importante para defender las causas nacionales?
R: No hay duda sobre el peso e importancia del papel central que desempeña la comunidad marroquí fuera de las fronteras de su país, en diversos ámbitos. Uno de los aspectos más importantes es la defensa de los asuntos cruciales para su nación, entre los cuales destaca la cuestión del Sáhara marroquí. Además, no podemos pasar por alto su rol en la activación de la economía mediante la atracción de inversiones extranjeras y la asignación de presupuestos considerables en moneda extranjera.
Sin embargo, la pregunta o interrogante que surge es ¿está el esfuerzo de la comunidad marroquí institucionalizado conforme a una estrategia bien definida por los organismos diplomáticos en el extranjero, así como por las constitucionales que velan por los intereses de los MRE? Mi respuesta es no, rotundamente, no. La labor desempeñada por esta importante comunidad se impulsa por el sentimiento innato de pertenencia a la patria y el deseo apasionado de contribuir de manera espontánea al desarrollo del país. Estas iniciativas autónomas, en su conjunto, a menudo se encuentran con la indiferencia y la falta de reconocimiento por parte de los responsables en general, pese al reconocimiento del Rey, que suele llamar a tener en cuenta todos los asuntos relacionados con los MRE.
Con esta situación, aparece la indignación de amplias secciones de marroquíes en el mundo, a causa de la negligencia de los sucesivos gobiernos, al no cumplir con las disposiciones del artículo 17 de la Constitución, que les otorga el pleno derecho de postularse, votar en las elecciones y obtener un asiento en las instituciones legislativas. Tiene que haber una reciprocidad en la relación de los MRE con su nación.
Entrevistado por: Najmi Abd Lkhalek
22-01-2024