
Al Jazeera estalló, el viernes 17 de marzo, un escándalo que involucra al actual presidente francés Macron que recibió dinero de Saif al-Islam Gaddafi, hijo del difunto presidente libio Muammar Gaddafi.
El canal Al Jazeera reveló, durante un programa, una conversación sobre los secretos del misterioso agente ruso «Maxim Al-Shugali», en el marco de una nueva investigación, los detalles de su arresto en Libia en 2019, y su relación sospechosa con Saif al-Islam Gaddafi y otros temas, además de hablar sobre la posesión de pruebas e información por parte de Saif al-Islam que incrimina a líderes y políticos conocidos en Francia, Estados Unidos y Ucrania.
Al-Shugali agregó que Saif Al-Islam Gaddafi tiene pruebas de que el expresidente francés Nicolas Sarkozy recibió dinero de Muammar Gaddafi y que existe un vínculo con el juez de instrucción en Francia. Este programa añade que en 2017, de la mano de Sarkozy, el actual presidente francés, Emmanuel Macron, recibió dinero libio a través de intermediarios argelinos, con el fin de financiar su campaña presidencial.
El programa ve en este asunto de la corrupción una causa permanente y sorda de debilidad del poder francés y, por una consecuencia natural, motivo de inseguridad democrática. Varios dignatarios franceses cercanos al presidente francés han amasado dinero de maneras sórdidas y deshonestas, una venalidad descarada denunciada por varias investigaciones de los medios.
Esta contundente investigación de Al Jazeera recuerda la publicación, en 2012, de un documento que pretendía probar que la victoriosa campaña de Nicolas Sarkozy había sido financiada por el régimen de Muammar Gaddafi. Testimonios de dignatarios libios, notas de los servicios secretos de Trípoli, acusaciones de un intermediario. En nueve años de trabajo, los magistrados han reunido una serie de pistas inquietantes que han dado cuerpo a esta tesis.
20-03-2023