
En las últimas dos décadas, la inversión en Marruecos ascendió al 30% del PIB anual, en un esfuerzo liderado por el Estado. Este modelo ha llegado a sus límites, ya que Marruecos aspira a que el sector privado desempeñe un papel de liderazgo en la promoción de inversiones y el impulso del crecimiento.
La adopción de la carta de inversión el año pasado tiene como objetivo aumentar la participación del sector privado en las inversiones. El ministro de Inversiones, Mouhcine Jazouli, dijo que se ofrecerá una serie de incentivos por valor del 30% del costo de la inversión a los inversores que lleven a cabo proyectos estratégicos o de alta tecnología.
Se darán incentivos similares a los inversores que opten por establecer proyectos en las regiones pobres de Marruecos, en un intento por cerrar la brecha entre las regiones.
Jazouli dijo que la ley era el próximo paso en el impulso de inversión de Marruecos que produjo una infraestructura de clase mundial que incluye 2000 km de carreteras y puertos.
Marruecos también ha anunciado un fondo de inversión por valor de 4.500 millones de dólares, incluida una contribución del gobierno de 1.500 millones y el resto será financiado por socios privados y multilaterales.
Hablando en una conferencia organizada por el consejo para el desarrollo y la solidaridad en Rabat, el director del fondo, Mohamed Benchaaboun, dijo que el objetivo era estimular las inversiones privadas que son rentables y que el fondo prestaría especial atención a la promoción de las PYME.
En su discurso de apertura en el evento, el gobernador del banco central de Marruecos, Abdellatif Jouahri, recordó el difícil contexto en el que Marruecos busca más inversiones, especialmente después de las tensiones geopolíticas y su impacto en las perturbaciones del mercado y la inflación que llevaron a políticas monetarias más estrictas en todo el mundo.
También señaló la necesidad de promover las inversiones privadas facilitando los trámites administrativos, luchando contra la corrupción y facilitando el acceso a la financiación.
Marruecos tiene como objetivo atraer inversiones por valor de 550 000 millones de dirhams ($55 000 millones) y crear 500.000 puestos de trabajo para 2026. Su modelo de desarrollo apunta a duplicar el PIB per cápita para 2035.
09-02-2023