
Para prepararse ante cualquier eventualidad, la Fuerzas marroquíes trabajan para adquirir nuevas armas de Estados Unidos, Israel, Turquía y también de Francia.
Poco a poco, Marruecos cuenta con una fuerza aérea moderna y disuasoria en estos tiempos, cuando aún persisten las tensiones en la región, observa el think tank Marroquí de Análisis de Políticas (MIPA) en un documento de política, destacando las nuevas adquisiciones o los pedidos en curso. El Reino tiene 23 aviones de combate F-16 actualmente en funcionamiento y se actualizará a una configuración F-16V. El año pasado, el Departamento de Estado de EE. UU. aprobó la venta de 25 aviones de combate F-16C/D Block 72. También está en marcha la adquisición de motores de instalación F-100 de Raytheon Technologies. Estos motores se utilizarán en los cazas F-16.
Tras los 12 Boeing opcionales encargados en 2020, en un acuerdo de 4.250 millones de dólares, se entregarán a Marruecos 24 helicópteros AH-64 Apache a partir de 2024. Otras adquisiciones en curso: cuatro drones MQ-9B SeaGuardian, equipados con munición guiada por láser y GPS. Marruecos recibió en enero el sistema antimisiles Barak MX, fabricado por Israel Aerospace Industries (IAI). Los drones Harop kamikaze también deberían entregarse a Marruecos. También se espera recibir aviones Mirage 2000-9 de los Emiratos Árabes Unidos.
Marruecos ha adquirido trece drones de combate Bayraktar TB2 de Turquía y ha pedido seis más. Marruecos también ha encargado el sistema de defensa tierra-aire VL MICA a la empresa francesa MBDA en virtud de un contrato de 192 millones de dólares.
Además de aumentar su capacidad aérea, Marruecos tiene la intención de fortalecer las actividades de mantenimiento, reparación y producción de aeronaves, incluidos los drones, para reducir su dependencia de las importaciones y posiblemente de las exportaciones. El gasto militar marroquí alcanzó, en 2020 y 2021, una proporción nunca antes alcanzada (4,3% en relación con el PIB), señala el informe del think tank.
30-01-2023