
España tiene un gran deseo de elevar el nivel de las relaciones de cooperación y asociación con Marruecos, durante la reunión de alto nivel (RAN) que tendrá lugar en la capital, Rabat, los días 1 y 2 de febrero, entre el Gobierno ibérico y su homólogo marroquí, después de la última reunión similar que tuvo lugar en 2015.
Madrid pretende dar un comienzo más sólido a las relaciones con Rabat, a partir del próximo mes de febrero, aplicando lo dispuesto en la nueva hoja de ruta entre ambos países, a través de la cual el Gobierno de Sánchez pretende evitar en el futuro crisis diplomáticas con Marruecos similares a la que ocurrió en el año 2021, especialmente porque uno de los artículos más destacados de la nueva hoja de ruta se aleja de la toma de decisiones unilateral.
Según muchos medios españoles, Madrid no solo busca fortalecer sus relaciones con Rabat mediante la firma de una serie de acuerdos en este contexto, sino que también pretende borrar los «daños colaterales» de su actual crisis con Argelia, duplicando el nivel de cooperación y asociación con Rabat para compensar algunos vínculos con Argelia.
Según las mismas fuentes, la declaración de Sánchez de su apoyo a Marruecos en el tema del Sáhara el pasado mes de marzo, que fue el detonador que provocó el estallido de una crisis con Argelia, provocó algunos daños que se relacionaron principalmente con los temas comerciales, especialmente porque varias empresas españolas estaban activas en el mercado argelino.
Sin embargo, las mismas fuentes indicaron que el nivel de perjuicio que sufren algunos sectores comerciales y económicos españoles por la decisión de Argelia de suspender la amistad y cooperación entre ambos países no constituye un problema mayor para España, y además se busca encontrar soluciones para resarcir estos perjuicios, y entre las soluciones está la de duplicar la cooperación y las relaciones comerciales con Marruecos, y la posibilidad de abrir el mercado marroquí a las empresas españolas que estaban activas en Argelia.
Argelia vinculó la vuelta a la normalidad de sus relaciones con España a la retirada de esta última de su posición de apoyo a Marruecos en el tema del Sáhara, mientras Madrid no ha dado ninguna oportunidad a esta maniobra, por lo que prefirió mantener sus relaciones con Marruecos y sacrificar sus relaciones con Argelia, por la existencia de una gran diferencia en la importancia de las relaciones con Rabat respecto a las relaciones con Argel.
Muchos observadores esperan que la próxima reunión de alto nivel en Rabat sea el comienzo de relaciones más avanzadas entre España y Marruecos, especialmente en el campo de una cooperación cada vez mayor en el campo del comercio y las inversiones, que hará que España continúe en los próximos años, el primer socio comercial del Reino de Marruecos después de que lograra desplazar a Francia en los últimos años.
19-01-2023









