Las Fuerzas Armadas Reales (FAR) inauguraron un nuevo mando militar en Alhucemas. Su campo de acción se encuentra entre Alhucemas y Moulay Bousselham, encuadrándose dentro de la región de Rabat-Salé-Kenitra.
El comando, y no una zona militar como informaron ayer martes medios españoles, tiene como objetivo combatir la inmigración irregular y el tráfico de drogas, así como vigilar el movimiento de barcos en el Mediterráneo occidental desde las bases navales de Alhucemas y Ksar Sghir.
La ceremonia de toma de posesión del jefe de este comando contó con la presencia del Inspector General de la Marina Real.
La creación de este comando se enmarca en «la reorganización de las unidades de las FAR para superar los desafíos que enfrenta el Reino, en particular la inmigración irregular y las actividades de contrabando». Retos que requieren “una buena coordinación de acciones y convergencia de esfuerzos entre las unidades militares y las autoridades locales para tomar medidas rápidas y efectivas en la costa”.
Su objetivo también es garantizar la inviolabilidad de las fronteras terrestres, aéreas y marítimas de Marruecos con total y constante disponibilidad.
La reorganización territorial de las FAR se inició con la creación, en enero, de una nueva zona militar, situada al este del Reino en la frontera con Argelia.
