
Varios comerciantes de Melilla expresaron su sufrimiento por el estancamiento comercial en la ciudad, especialmente en las zonas fronterizas, debido a la imposibilidad de permitir la entrada a los ciudadanos marroquíes para realizar sus compras, como ocurría en el pasado antes la irrupción de la epidemia, según informan medios locales.
Según la misma fuente, numerosos comerciantes afirmaron que el proceso de tránsito para el movimiento de la comunidad marroquí, que actualmente vive Melilla, no beneficia mucho, y reclamaron a las autoridades que trabajen necesariamente para que los ciudadanos marroquíes de las ciudades vecinas entrar en Melilla para ir de compras.
Los comerciantes melillenses exigen que no se imponga un «visado» a los ciudadanos y turistas marroquíes para entrar en la ciudad, como pretenden las autoridades locales en Melilla en coordinación con su homóloga en Ceuta, tras reabrir los dos cruces fronterizos.
En los últimos meses, Marruecos y España habían acordado reabrir los cruces de Melilla y Ceuta en el sentido de la circulación de forma escalonada, la primera para las personas residentes en la Unión Europea y la segunda para los marroquíes que tienen contrato de trabajo en las dos ciudades.
Una comisión mixta marroquí-española aplazó el examen de la categoría de ciudadanos marroquíes residentes en las provincias de Tetuán y Nador, que previamente habían entrado en Ceuta y Melilla únicamente con pasaporte, al desconocerse hasta ahora qué condiciones se les impondrán tras el retraso en permitirles entrar en las dos ciudades.
26-07-2022