
Marruecos canceló dos reuniones oficiales que iban a reunir a una delegación de emprendedores tecnológicos y activistas culturales procedente de Israel con el Ministro de Juventud, Cultura y Comunicación, Mehdi Bensaid, y con representantes del Parlamento marroquí, tras el asesinato de la periodista palestina en la cadena «Al Jazeera», Shireen Abu Akleh, el 11 de mayo de 2022.
El diario «Jerusalem Post« reveló que la delegación israelí llegó a Marruecos coincidiendo con el asesinato de Abu Akleh, y la mayoría de sus miembros no sabían lo sucedido antes de que dos de ellos se percataran de la noticia que comenzaba a correr sobre el hecho de que la periodista palestina fue asesinada por un francotirador israelí en Jenin. A continuación, se suponía que el grupo visitaría el parlamento marroquí para reunirse con los representantes electos del Partido Autenticidad y Modernidad (PAM), pero la reunión fue cancelada.
El Gobierno marroquí, por su parte, tomó posición sobre lo ocurrido, cuando el Ministro encargado de los sectores de cultura y comunicación, Mehdi Bensaid, canceló una reunión con la delegación a pesar de su preprogramación, y durante la semana en que los israelíes estuvieron presentes en Marruecos, se cancelaron sus encuentros con varios actores políticos a pesar de que continuaban sus encuentros de carácter cultural y comercial.
El informe consideró que el asesinato de Abu Akleh supuso una “presión” sobre los acuerdos firmados entre Israel y los países árabes, y citó fuentes marroquíes, que no revelaron su identidad, afirmando que “la lamentable muerte de la periodista palestina y los hechos que tuvieron lugar en la mezquita de Al-Aqsa en el mes del Ramadán tuvieron un impacto significativo en la situación de larelación entre el Reino y el estado hebreo», señalando que «los medios de comunicación en Marruecos son pro-palestinos, y los marroquíes tienen mucha simpatía con la causa palestina, y los grandes acontecimientos afectan a la opinión pública».
Por su parte, el jefe de la Oficina de Enlace de Israel, David Govrin, fue la única persona que asignó una recepción oficial para la delegación, y se citaron declaraciones suyas de que los hechos ocurridos en Jerusalén, que calificó de “disturbios”, junto con el asesinato de Abu Akleh “hacen más difícil el desarrollo de las relaciones marroquíes-israelíes”.
22-05-2022