18-02-2022
El Rey Mohammed VI afirmó que garantizar la educación, acelerar el ritmo de formación y empleo de los jóvenes, promover la cultura, regular la migración y el movimiento de personas es un componente esencial de la asociación entre la Unión Africana y la Unión Europea.
En un discurso ante la sexta cumbre Unión Europea-Unión Africana, que comenzó el jueves en Bruselas, el Rey de Marruecos destacó que estos objetivos prometedores son los que deben tenerse en cuenta en el enfoque de asociación deseado.
“Ni África ni Europa son capaces de lograrlo aisladamente”, dijo Mohammed VI. Por lo tanto, «tenemos una responsabilidad conjunta en este sentido dictada por nuestros intereses comunes”.
En este discurso, que ha sido leído por el Ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, el Rey ha recordado que la educación, la cultura, la formación profesional, la movilidad y la migración “son cuestiones que en conjunto constituyen las prioridades de nuestro trabajo en Marruecos y África, y en el marco de nuestra asociación con la Unión Europea”.
En ese contexto, resaltó que el denominador común entre todos estos temas es la juventud, en la cual la alianza entre los dos continentes debe invertir en y para ellos para lograr que alcancen su máximo potencial.
El Rey ha explicado que “estos grandes sectores se han visto muy afectados por las repercusiones de la pandemia, lo que requiere un amplio esfuerzo conjunto por nuestra parte”.
En el ámbito de la educación, el Rey recordó que “el 94% de los estudiantes del mundo sufrieron el cierre de sus instituciones educativas en el punto álgido de la pandemia”, instando en este sentido a garantizar la continuidad de la educación, teniendo en cuenta el nuevo contexto de transformación digital en el sector educativo.
“Esta demanda general es de vital importancia en África, donde los menores de veinte años representan el 50% de la población total”, dijo.
«Nuestras escuelas, universidades e instituciones de formación profesional, al igual que nuestras economías, necesitan lograr una fuerte recuperación para compensar las casi 1.800 millones de horas de aprendizaje perdidas», añadió Mohammed VI.
En cuanto a la cultura, el Soberano subrayó que tampoco se salvó de las repercusiones de la pandemia, “primero en términos económicos, luego en términos de acceso a la misma”, y señaló que el impacto de la pandemia en este ámbito fue profundo.
En esta ocasión, el Rey destacó la importancia de retomar diversas formas de cooperación cultural, para dar un nuevo impulso a este sector, que es una verdadera palanca de acercamiento entre África y en Europa.
En relación con el tema de la migración, señaló que la pandemia ha demostrado que los migrantes y sus movimientos no dañan la economía.
Por el contrario, el Rey ha explicado que tienen un impacto positivo, «tanto en los países de acogida, en los que suelen trabajar como trabajadores esenciales, o en sus países de origen», pidiendo «abordar este tema, no sólo como un desafío, sino como un enorme recurso de oportunidades».
“Afirmamos con convicción, como pioneros de la Unión Africana en el tema migratorio, que siempre hemos buscado disipar malentendidos en torno a este tema. Este es el mensaje del Observatorio Africano de la Migración, que se estableció por nuestra iniciativa, que es proporcionar datos objetivos y datos sobre la migración, aclarar hechos, reconciliar los intereses de África y Europa en caso de que entren en conflicto, y reemplazar la perspectiva puramente de seguridad, la lógica de la relación orgánica entre el movimiento de personas y el desarrollo, en línea con el espíritu del enfoque humanitario de la Carta de Marrakech.