
01-02-2022
El Alto Comisionado de Planificación (HCP) realizó encuestas sobre el uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) entre 5.701 empresas en Marruecos. El informe muestra que la crisis sanitaria ha acelerado este uso, sin embargo aún queda un largo camino por recorrer.
El HCP presentó este martes los resultados de dos encuestas realizadas a nivel de empresas, con el fin de evaluar la situación de la integración de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
Según el informe, la primera encuesta se realizó en 2019 entre 2.101 empresas que operan en el campo de la construcción, la industria, el comercio y los servicios de mercado no financieros y «tenía como principal objetivo captar las actividades de las empresas, en su diversidad, y las condiciones económicas y contexto social en el que operan y acomodan sus percepciones sobre el uso de las nuevas tecnologías”.
La segunda encuesta, realizada en diciembre de 2020 con un panel de 3.600 empresas, tenía como objetivo «evaluar los efectos de la crisis sanitaria del Covid-19 en sus actividades y recibir sus valoraciones sobre las perspectivas de evolución de la actividad, el empleo y la inversión en 2021”, dice la misma fuente.
Los resultados muestran que las empresas están bastante conectadas “con tasas de acceso que alcanzaron el 81%, en promedio, para Mypes (Micro y Pequeña Empresa), 97,9% para PyME (Pequeña y Mediana Empresa) y 99,5% para GE (Grandes Empresas) en 2019”. El intercambio de correos electrónicos es el primer uso de Internet para el 92% de las empresas encuestadas, pero «otros usos están aún menos extendidos, en particular el acceso y modificación de documentos que no son utilizados por el 38% de las empresas y el uso de software profesional especializado que se limita al 59% de ellos”.
El uso de las TIC está lejos de ser generalizado, “Más de la mitad de las empresas consideran débil la integración de las TIC en la gestión de los recursos humanos, en sus intercambios con las administraciones públicas, con los proveedores y con los clientes. Estas empresas eran en su mayoría jóvenes con una edad de creación que no superaba los 10 años”, especifica el informe, y añade que las empresas con más de 20 años declaran “una mayor integración de las TIC en la gestión de sus intercambios con proveedores, clientes y administraciones públicas en comparación con las operaciones de gestión de recursos humanos o el desarrollo comercial».
“6 de cada 7 empresas no realizaban contratación TIC en vísperas de la crisis del Covid-19”. De hecho, según los resultados de la encuesta, se observa que el 86% de las empresas no contrataron especialistas en TIC durante el período 2016-2018. “Para el 14% de las empresas que reportaron dificultades de contratación, los altos requerimientos salariales, la inestabilidad de estos perfiles en el puesto de trabajo y la falta de cierta cualificación fueron las principales limitantes a la contratación en materia TIC. Pocos de ellos confiaron en sus propios empleados para desarrollar, adaptar o dar soporte a las soluciones informáticas ante las repercusiones de la crisis del Covid-19”, explica el informe.
En 2019, solo el 31% de las empresas marroquíes tenían un sitio web. Las Mypes constituyen el 93 % de las empresas marroquíes, y “más de 3 de cada 5 Mypes no tenían ni un sitio web ni una página en las redes sociales”.
Sin embargo, las TIC se utilizan más cuando se trata de empresas que operan en servicios distintos al transporte y almacenamiento. Han sido los más afectados por los efectos de la crisis sanitaria, por lo que “se han planteado aumentar las cuotas de inversión destinadas a innovación (desarrollo de nuevos productos) y transformación digital (digitalización de servicios internos y externos), para llegar a 40%, en promedio, en 2021”.
“En comparación con las expectativas de inversión para el año 2021, se contrastaron los logros de acuerdo con las fluctuaciones que habían marcado las actividades sectoriales. En particular, los servicios, especialmente las actividades de alojamiento y restauración, los servicios financieros y las telecomunicaciones, que habían dado prioridad al desarrollo de su digitalización en 2021, se habrían enfrentado a una disminución continua de sus valores añadidos iniciada en 2020. En cambio, las empresas industriales habrían recuperado en 2021 su nivel anterior a la crisis y su situación financiera habría mejorado, en particular en algunos sectores exportadores que se han beneficiado de un crecimiento sostenido de sus precios de venta en el extranjero», concluye el informe.