25-01-2022
Pedro Sánchez, ha sido de nuevo ninguneado por parte de Joe Biden.
Paralelamente a la creciente presión sobre el expediente ucraniano, Estados Unidos sigue explorando la vía diplomática y reuniéndose con líderes europeos, excluyendo al Presidente de Gobierno español.
En la noche del 24 de enero se organizó una videoconferencia entre el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y varios líderes europeos: el presidente francés Emmanuel Macron, el canciller alemán Olaf Scholz, el primer ministro italiano Mario Draghi, el secretario general de la OTAN Jens Stoltenberg, El presidente polaco Andrzej Duda, el primer ministro británico Boris Johnson, el presidente del Consejo Charles Michel y la presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen.
“Joe Biden no ha querido incluir a Sánchez, ya que Madrid acogerá la cumbre de la OTAN el próximo mes de junio, durante la cual España actuará como coordinadora de los trabajos para el nuevo concepto estratégico de la Alianza Atlántica”, indican los medios españoles. Hace una semana, José Manuel Albares estuvo en Washington pidiendo el apoyo de Estados Unidos en la crisis con Marruecos y proponiendo, como «aliado fiel», el compromiso total de España con la OTAN y el despliegue militar «ante la amenaza rusa contra Ucrania”. Pese a ello, Joe Biden no ha vuelto a contar con Pedro Sánchez, en una reunión tan importante para el futuro de Europa.
Ha quedado claro que Washington no cuenta con Madrid entre sus socios transatlánticos, que deben encontrar una respuesta común al refuerzo militar de Rusia en la frontera con Ucrania. «Si la diplomacia falla, estamos muy avanzados en la preparación de respuestas ante una posible agresión rusa y esta será sin duda una acción rápida y decidida, con una fuerte unidad», aseguró el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.
Cabe recordar que Joe Biden había excluido a España de su gira europea de junio de 2021, durante la cual insistió en la firmeza de la alianza transatlántica en su cara a cara con Vladimir Putin, que tuvo lugar en Ginebra más tarde.