20-12-2021
Tras meses de tensiones diplomáticas, ¿van Madrid y Rabat camino al apaciguamiento? Según la prensa española, ambos países tienen todo el interés en empezar sobre una nueva base porque se necesitan mutuamente.
Estos inicios de reconciliación fueron en primer lugar, como recordatorio, establecidos por el Rey Mohamed VI durante el discurso pronunciado el 20 de agosto. El soberano marroquí había expresado su deseo de poner fin a la crisis diplomática entre el Reino y España. A raíz del mensaje del Rey Mohamed VI, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, se apresuró a agradecer al «Rey de Marruecos sus palabras» y recordar cómo el Reino es «un aliado estratégico». Asimismo, la destitución de la Ministra de Asuntos Exteriores española Arancha González Laya, el 12 de julio, fue percibida por Marruecos como un regalo que se le había ofrecido, aunque fuera por motivos de política interna, y de delicado equilibrio dentro del gobierno de coalición.
La semana pasada, José Manuel Albares, Ministro de Asuntos Exteriores de España, en el Senado español lanzó un par de mensajes, destacando que la «crisis con Marruecos ya se ha dejado de lado». Este último, sin embargo, desea reconstruir una relación digna del siglo XXI y esto se hará poco a poco. El Ministro también dijo que todo el Gobierno español quería llevar las relaciones al siguiente nivel asegurándose de que las relaciones volvieran a la fluidez y que se realizaran frecuentes intercambios con Nasser Bourita.
En declaraciones a la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado español, el canciller español expresó su esperanza de que Marruecos haga esfuerzos para disuadir la inmigración a las Islas Canarias.
Otros funcionarios españoles se suman al llamamiento para restablecer las relaciones con Marruecos. El senador de la coalición canaria Fernando Clavijo también dijo que España debe mantener las mejores relaciones posibles con Marruecos, dado que el país es un socio estratégico en la lucha contra la inmigración ilegal.