
26-10-2021
La Agrupación por la Cultura y la Democracia (RCD), uno de los principales partidos políticos de la oposición en Argelia, denunció «una política liberticida y antisocial», apoyada por un dispositivo implacable de represión.
«La brutalidad de estas medidas antisociales está respaldada por un implacable dispositivo de represión policial y judicial que sofoca toda la vida pública, política, sindical o asociativa», dijo la RCD en un comunicado difundido al final de su reunión mensual ordinaria.
Según el partido, la mayoría de los problemas que enfrentan los argelinos hoy son consecuencia de la política «liberticida» y «antisocial» adoptada por el gobierno después de la Revolución del Movimiento por la Paz de febrero de 2019.
Esta política está provocando «un peligroso aumento del desempleo, un alarmante repunte de la inmigración ilegal y una creciente inseguridad en el país», lamentó.
En este sentido, expresó «gran preocupación» por el continuo deterioro del poder adquisitivo y las condiciones de vida de todos los empleados y el descenso a los infiernos de las categorías sociales más frágiles.
«Ningún producto o servicio escapa a una subida de precios», alarmó el partido por el que la «política antisocial que lidera el gobierno» apunta a «acabar, de la forma más brutal, con el subsidio a las materias primas».
Para la RCD, el «discurso populista contra la especulación sólo pretende ocultar una orientación escrita en el programa del ejecutivo».
Esta orientación, prosigue la RCD, consiste en «la devaluación progresiva y continua del dinar y el estrangulamiento de la oferta de insumos productivos para frenar el déficit de la balanza comercial que está excavando las pocas reservas salvadas por la bulimia de los clientes».
«Esta política organiza precisamente los aumentos de precios y, de hecho, también la especulación (depreciación de la moneda y escasez de productos)», añade la misma fuente.
Ante esta angustia y las legítimas preguntas de la ciudadanía, el gobierno apunta a sus medios sobre supuestos enemigos a ser destruidos y aumenta la búsqueda de chivos expiatorios para justificar su terquedad en perseguir una política basada en el expolio de la soberanía del pueblo y el dominio sobre las riquezas del país”, denunció la RCD.
Criticó al «núcleo del sistema político» por haber tomado «la decisión inicua de recomponerse en el vacío» en lugar de «cultivar esta formidable energía del movimiento revolucionario pacífico de febrero de 2019 en beneficio del país, ayudando a su desarrollo y hacer realidad las aspiraciones de universalidad de las poblaciones”.
Sobre el registro de vulneraciones de libertades, la RCD denunció enérgicamente «el inaceptable acecho represivo y judicial» del que son víctimas muchos de sus activistas, anunciando la intención de lanzar «una iniciativa judicial contra todos los que se han hecho cómplices en esta operación de instrumentalización de la justicia con fines políticos».