
10-06-2021
En prisión preventiva desde mayo de 2020 y en huelga de hambre durante 63 días, el periodista Soulaimane Raissouni se encuentra en un estado cada vez más debilitado. Tras la visita de sus abogados el miércoles, su Comité de Apoyo anunció que los análisis médicos realizados al detenido mostraban graves desequilibrios. El indicador «más peligroso» es el nivel de creatinina en su cuerpo, debido a la larga duración de la huelga de hambre.
Un comunicado de su defensa subraya que este es un signo importante de una disfunción que podría derivar en insuficiencia renal, según un informe verbal del médico de la prisión de «Oukacha».
La declaración de apoyo a Raissouni menciona que después del examen, el profesor Maarouf insistió al personal de salud en que el problema renal debe resolverse. Sin embargo, advirtió que tratar de solucionarlo bebiendo mucha agua pondría en peligro la salud del periodista, dados los riesgos de elevar la insulina en su sangre y crear un desequilibrio de potasio. Esto podría provocar un paro cardíaco, Soulaimane ya sufre de presión arterial alta.
Según contactos cercanos a Raissouni, el personal de la prisión llama constantemente a este último para comer dátiles para no empeorar su caso, pero él se niega constantemente a pesar de su insistencia. Por otro lado, agradeció al personal médico su actitud humana hacia él.
Los familiares del periodista recuerdan que perdió 32 kilogramos, habiendo bajado considerablemente su peso durante un año de detención y su huelga de hambre.