
03-06-2021
La crisis diplomática entre Marruecos y Alemania rompió el acuerdo entre los dos países sobre hidrógeno verde. Los “malentendidos profundos” entre Rabat y Berlín, aún no se han resuelto.
Las autoridades marroquíes han suspendido el acuerdo de cooperación firmado en julio de 2020 entre Marruecos y Alemania para el desarrollo del sector de producción de hidrógeno verde y el establecimiento de proyectos de investigación e inversión en el uso de este material, informa el medio digital «Atalayar». La revocación de este acuerdo «tendría un impacto directo en Alemania en su plan de neutralidad energética tras haberse fijado como objetivo reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 65% para 2030», comenta el medio. Los miembros del Partido Demócrata Libre (FDP) también han cuestionado el impacto que este enfoque podría tener en los problemas energéticos.
En respuesta a la decisión, el Ministerio de Relaciones Exteriores alemán dijo que “la alianza del hidrógeno germano-marroquí se basa en una cooperación larga y fructífera y en una asociación energética, que siguen siendo de interés mutuo desde el punto de vista del Gobierno federal, pero está siendo probado por los desarrollos políticos actuales”. Los dos países han dado su acuerdo de principio para la realización de dos nuevos proyectos. El primero se refiere a «Power-to-X». Su objetivo es desarrollar la producción de hidrógeno verde. Fue propuesto por la Agencia Marroquí de Energía Solar (Masen). El segundo se refiere a la transferencia de conocimientos y la creación de capacidad en asociación con el Instituto de Investigación de Energía Solar y Nuevas Energías (Iresen).
«Alimentar un telón de fondo hostil contra Marruecos que afecta a los proyectos de hidrógeno verde no es de interés para Alemania», dijo Christoph Hoffmann, portavoz del Partido Liberal Democrático para la política de desarrollo. En cuanto al Ministro de Relaciones Exteriores alemán, Heiko Maas, consideró necesario ir a Marruecos para aliviar las tensiones.
En una correspondencia fechada el 1 de marzo de 2021, Nasser Bourita pidió al Jefe de Gobierno y otros miembros del Gobierno que suspendieran «todo contacto, interacción o acción tanto con su embajada en Rabat como con organizaciones de cooperación y fundaciones políticas alemanas».