31-05-2021
La recepción por parte del Gobierno español del líder del Frente polisario, Brahim Ghali, en su territorio bajo una identidad usurpada y con documentos falsos constituye una flagrante violación del Código Penal español, sabiendo que el imputado está siendo procesado por la justicia del país ibérico por crímenes de lesa humanidad, afirmó el abogado y activista de derechos humanos, Abdelkebir Tabih.
Al invocar consideraciones humanitarias en un intento de explicar su actitud, el Gobierno español admitió implícitamente que tenía conocimiento de la usurpación de identidad de la persona en cuestión y que su pasaporte fue falsificado, lo que se considera un delito según lo estipulado en el párrafo 3 del artículo 451 del Código Penal español, indicó en una reacción al caso de Brahim Ghali.
Tabih también señaló que el Código Penal español prevé una pena de 6 meses a tres años de prisión contra cualquier individuo que haya ayudado a una persona a escapar de la investigación realizada por la Autoridad o sus agentes sobre crímenes de lesa humanidad, conflictos armados y terrorismo.
La información según la cual la justicia española escuchará el próximo 1 de junio a Brahim Ghali sobre la denuncia interpuesta en su contra por crímenes de lesa humanidad es una prueba tangible de que el Gobierno de Madrid ha ocultado la identidad de una persona procesada para garantizarle su fuga, subrayó.
Marruecos tiene derecho a esperar la posición que tomará la justicia española con respecto a todos los cómplices de este asunto y a todos aquellos que hayan falsificado el pasaporte utilizado por Brahim Ghali para acceder al territorio español, así como a quien ordenó que se estampara el sello en el pasaporte falso cuando supo que era falso, agregó Tabih.
El Gobierno español se enfrenta ahora a otro dilema con su justicia, dado que Brahim Ghali se encuentra en territorio español como inmigrante ilegal, ingresado con un pasaporte falso, lo que impone legalmente a la justicia de este país confiscar el pasaporte falso y expulsarlo como cualquier inmigrante que ingresara ilegalmente, explicó.
Con esta actitud que el Reino no esperaba, el Gobierno español ha bloqueado el sistema de justicia del país, dijo Tabih.
Al insistir en que el recurso por el Gobierno español al mismo procedimiento para la exfiltración a Ghali no hará más que agravar la crisis, Marruecos alude al estatuto jurídico de esta persona, es decir, el estatuto de un inmigrante clandestino que ha entrado en España con un pasaporte falso, concluyó.