22-05-2021
Tras una escalada verbal por parte de funcionarios españoles y de la Unión Europea sobre la crisis migratoria en las ciudades de Ceuta y Melila, Alemania parece abstenerse de exacerbar la tensión llamando a la calma y la vuelta a la moderación.
Según El País, el portavoz del Gobierno de Angela Merkel, Steffen Seibert, llamó el viernes a trabajar con Marruecos y otros países de tránsito para gestionar los flujos migratorios irregulares y acabar con la afluencia masiva de migrantes a las puertas de Ceuta. «Lo ocurrido demuestra una vez más que se necesitan esfuerzos comunes europeos para detener la inmigración ilegal y para eso tenemos que trabajar con países de tránsito como Marruecos», dijo, agregando que su Gobierno había seguido el flujo de miles de personas hacia Ceuta «con preocupación», sin ocultar su alivio ahora que la situación estaba bajo control.
Este llamamiento a la calma llega en un momento en el que la tensión entre Marruecos y Alemania alcanza su punto culminante, los dos países ya no se hablan tras la suspensión de contactos con la embajada alemana en Rabat y la convocación de la embajadora del Reino para consultas. El Gobierno de Angela Merkel no parece querer echar más leña al fuego, poniéndose categóricamente del lado de España en la crisis en Ceuta, como las instituciones de la Unión Europea que claramente han apoyado a Madrid.
