20-05-2021
El partido político Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP) pidió al Gobierno español que deje de «ofender» a Marruecos y que siga una política de amistad y buena vecindad en el marco de la claridad y la responsabilidad política y moral al servicio de la paz, la seguridad y la cooperación en la región.
En un comunicado emitido tras su reunión de ayer miércoles 19 de mayo, el buró político expresó su profundo pesar por la postura adoptada por la Comisión Europea en su anuncio tras los últimos acontecimientos, de que Ceuta y Melilla son tierras europeas, olvidándose de que existen en África, y que es un remanente del colonialismo que se asocia con muchos de los países europeos en su ocupación de la mayor parte de las tierras africanas, incluido Marruecos, donde estuvo expuesto al complot de división en un momento en que su pueblo seguía resistiendo a las fuerzas de ocupación que practicaron todo tipo de genocidio contra ellos.
La reunión del buró político se distinguió por la detallada presentación del primer secretario sobre el tema y, a continuación, examinó la peligrosa evolución de las relaciones marroquíes españolas, señalando que “el Gobierno español recurrió a aumentar la tensión a través de la visita de su presidente, Pedro Sánchez, a Ceuta y el despliegue de unidades del ejército español, que son iniciativas de provocación y demostración de fuerza, así como la campaña lanzada por numerosos medios de comunicación, que incluye atentados contra Marruecos y marroquíes con descripciones racistas y blasfemas que contradicen la principios de la ética periodística.
«El tema del Sáhara marroquí no es más que un eslabón en esta conspiración con el objetivo de dividir a Marruecos, que es lo que España ha seguido haciendo, a través de su apoyo financiero y mediático a los separatistas», agregó el comunicado.
El comunicado destacó que recibir a Brahim Ghali fue una traición y un apuñalamiento por la espalda por parte de España en un momento en el que habla hipócritamente sobre la amistad y las relaciones de buena vecindad, que actualmente requieren una revisión exhaustiva por parte de Marruecos.