
31-03-2021
por: Youssef Assouna – Escritor y poeta.
Durante milenios, el mundo siempre ha sido testigo de conflictos internacionales, tanto militares como económicos, resultado del deseo de cada sistema político de dominar a los demás e imponerles su oportunismo según su propia agenda. Esta rivalidad crea un gran desafío que amenaza a todos los países, culturas y pueblos. Una élite de intelectuales de diferentes países se interesó expresamente por este problema con el objetivo de encontrar soluciones adecuadas que redujeran las grandes diferencias y fortalecieran los lazos de interacción entre los pueblos. Su investigación lleva a considerar el diálogo cultural como la única alternativa que puede constituir el elemento básico sobre el que se sustenta la culturalidad y la interculturalidad; esto resucitará los lazos culturales al servicio de toda la humanidad.
Debe ser aprovechado y utilizado de manera positiva en beneficio de las personas mejorando el progreso científico y la forma de vida de las personas. Es cierto que el diálogo cultural juega un papel importante en la comunicación educativa y moral orientada a educar a los hombres e invita a la tolerancia ya la irradiación del odio y el racismo. El diálogo cultural actúa con el objetivo de dar a conocer la cultura del otro, sus símbolos religiosos, sus hábitos y costumbres, sus creencias(…).
El diálogo como acción cultural, intelectual de conocimiento y capacidad puede considerarse como la única vía y la solución ejemplar para crear un espacio humano tolerante y una sociedad universal libre de toda forma de rechazo, dominación, explotación. Esto permitirá establecer un sistema humano globalizado, abierto a todas las categorías y en el que reina el amor, la tolerancia y el respeto por la diversidad cultural y social. No podemos negar que el diálogo cultural se realiza a través de los medios de comunicación que tienen la capacidad de organizar intercambios interculturales y civilizacionales con los medios técnicos, metódicos y artísticos objetivos, a través de programas socioculturales.
Citamos como ejemplo algunos programas franceses que operan en la propagación de la cultura francesa a través de la religión, yendo más allá de la imagen y los prejuicios del modelo heredado. Esto fortalecería la tolerancia respetando la diferencia. Estos programas brindan servicios y accesorios específicos para el aprendizaje de idiomas en Internet. El diálogo cultural también puede respaldar los esfuerzos de los bibliotecarios de Internet para adaptarse a los avances tecnológicos. También puede intervenir en la digitalización y renovación del papel del cine a través de un conjunto de programas de actividades culturales y formativas. El festival internacional de cine de Cannes es una prueba fehaciente de ello. Tiene como objetivo establecer una cultura común en la que todos los creadores cinematográficos puedan participar para desarrollar sus herramientas de producción. Este festival es también una oportunidad para exportar experiencias en el campo de la educación, la cultura y el idioma, y participar, gracias a sus conocimientos, para mejorar el campo cultural y artístico en Francia y en otros lugares.
Si esta es la situación cultural a nivel global, qué pasa con el nivel local, nacional?
Considerando lo anterior como beneficioso y una oportunidad de entendimiento en un momento en el que proliferan las guerras internas y los atentados a la dignidad y los derechos humanos, los responsables deben insistir en la necesidad de intercambios de comunicación y diálogo cultural informativo, a través de los medios de comunicación y la organización de talleres, reuniones y congresos internacionales, por lo que pueden brindar la fuerza necesaria para mitigar las causas de los conflictos interculturales y hacer de estas diversidades un alma positiva al servicio de toda la humanidad, sin discriminación, para preservar los derechos de las personas, respetar su dignidad y reducir el calor de los conflictos entre pueblos. Los responsables también deben actuar positivamente para difundir la paz en el mundo.
La cultura es el pilar central de las civilizaciones. Entonces, ¿quién nos impide tomar este camino a diario? Ya que resulta que el diálogo es el garante infalible de la diversidad cultural y el progreso de las sociedades humanas.
Si el diálogo no irradia diferencias, al menos debe reducirlas y acercar los puntos de vista. Esto evita que las personas se maten entre sí y que proliferen las rivalidades interculturales. Fundaría los pilares del equilibrio y la tolerancia entre los pueblos para lograr una humanidad armonizada, sin enfrentamientos, sin celos y sin guerras.
No decimos: «siembran la paz entre ustedes, construyan el diálogo entre ustedes”.