
27-11-2020
«La Política Europea de Vecindad (PEV) es más que necesaria, dado el contexto de crisis pandémica que vivimos», afirmó ayer jueves el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, en su intervención con motivo de la Conferencia Ministerial “UE-Vecindad Sur, por una asociación renovada”.
Bourita indicó que el Covid-19 desafió el concepto de vecindad, dio otro sentido al concepto de seguridad y demostró debilidades, pero también revelaron oportunidades para ser explotadas juntos.
Después de 17 años de implementación, la PEV conserva toda su relevancia estratégica, señaló, destacando que es relevante en su espíritu, el de ofrecer a estos diferentes vecinos caminos de asociación diferenciados, relevantes en su método, ya que moviliza una gama de instrumentos y programas de acuerdo con nuevos métodos, y relevantes en su experiencia, el de reunir a diferentes países.
Así, los valores de la PEV se materializan mediante un diálogo político institucionalizado, con más de 30.000 millones de euros invertidos entre 2003 y 2020, mediante métodos de apoyo diversificados, a veces complejos pero siempre adaptados, cooperación sectorial estructurada y acceso abierto a agencias y programas, señaló el ministro. Sin embargo, los 17 años de la PEV han mostrado algunos límites por superar, señalando que al final, no ha desplegado una oferta suficientemente fructífera para reducir la brecha de desarrollo entre las dos orillas.
«La riqueza producida en el Sur es 13 veces menor que en el Norte y la brecha en el nivel de vida es de casi 1 de cada 5», indicó Bourita, agregando que la contribución de los instrumentos de los recursos financieros siguieron siendo limitados. La PEV debe trascender la lógica financiera pura, sugirió Bourita, y agregó que una PEV renovada se beneficiaría de tener instrumentos flexibles, adaptados al compromiso y las prioridades de cada socio.
También abogó por una mayor participación del Sur en la «toma de decisiones» al respecto, como los miembros del Espacio Económico Europeo.
Respecto a Marruecos, Bourita dijo que la Unión Europea es una evidencia geoestratégica. “El Rey Mohammed VI conoce bien la UE, sus mecanismos y su asociación con Marruecos. El Soberano nos ha marcado un rumbo, que es nuestra doctrina”, concluyó.