
20-11-2020
El Tribunal Constitucional español aprobó, ayer jueves, las devoluciones en caliente de inmigrantes ilegales en Ceuta y Melilla, una práctica muy criticada por varias organizaciones de derechos humanos.
La más alta jurisdicción española anunció que había validado casi toda la Ley de Seguridad Ciudadana de 2015, de la cual una medida permite el retorno inmediato de los inmigrantes ilegales que cruzan la frontera desde Marruecos.
“El régimen especial para Ceuta y Melilla de devolución en la frontera de los extranjeros que intentan ingresar ilegalmente (…) está en consonancia con la doctrina del Tribunal Europeo de Derechos Humanos”, sentenció el tribunal.
La institución precisó que estas expulsiones deben llevarse a cabo respetando «las garantías» que ofrecen a los extranjeros los estándares internacionales adoptados por España, con «especial atención» a los más vulnerables, como los menores o las mujeres embarazadas.
Estas devoluciones de Ceuta y Melilla, son ampliamente criticadas por las ONG, que las ven como una violación del derecho de los migrantes a buscar asilo. Antes de llegar al poder en junio de 2018, los socialistas se comprometieron a acabar con estas prácticas, pero esta ley no ha sido reformada.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos revocó en febrero una decisión anterior que condenaba a España, validando así estas devoluciones en caliente.
Esta decisión del Tribunal Constitucional concierne únicamente a Ceuta y Melilla, donde las llegadas de migrantes han caído un 70% desde principios de año respecto al mismo periodo de 2019. Por tanto, no se aplica a Canarias, cuya situación es opuesta, ya que más de 16.700 migrantes llegaron este año a este archipiélago, es decir, once veces más que durante el mismo período del año pasado.