
17-08-2020
La Instancia Marroquí de Derechos Humanos (IMDH) advirtió de la gravedad de la decisión del ministro de Energía, Minas y Medio Ambiente publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del 3 de agosto de 2020, sobre las condiciones y los mecanismos de tránsito e importación de residuos de los países industriales, donde se les prohíbe vertirlos en la naturaleza o incinerarlos en los países exportadores.
La IMDH consideró que la decisión constituía «una violación flagrante de las convenciones internacionales y nacionales, especialmente el artículo 12 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, que reconoce el mejoramiento de todos los aspectos de la salud ambiental e industrial, así como el artículo 31 de la Constitución de Marruecos, que estipula el derecho a vivir en un medio ambiente sano».
La Instancia condenó la decisión del Gobierno de importar desechos de países industriales contaminados y utilizarlos en Marruecos para reducir los costos de producción y aumentar los márgenes de beneficio a costa «de la salud de los ciudadanos y el medio ambiente, en un claro insulto a su dignidad al convertir a Marruecos en un vertedero de los países contaminantes».
También denunció lo que describió como métodos de «elusión» en un momento en que los países desarrollados se comprometen a ofrecer ayudas tecnológicas en el denominado mecanismo de «desarrollo limpio» a los países en vías de crecimiento.
La IMDH rechazó categóricamente «las acciones subversivas de los ecosistemas marroquíes mediante la contaminación de los países industrializados y sus empresas intercontinentales, en connivencia con el Gobierno marroquí, que viola el derecho a la vida, a la integridad física y a la dignidad del ciudadano marroquí».