China ha suspendido este domingo la prohibición de exportar a Estados Unidos tres metales considerados esenciales para la industria moderna; el galio, el germanio y el antimonio. Esta decisión, que entrará en vigor hasta el 27 de noviembre de 2026, constituye una señal clara de distensión entre Pekín y Washington tras meses de fricciones comerciales y tecnológicas.
Las restricciones, impuestas en diciembre de 2024, afectaban a productos de “doble uso”, es decir, aquellos con aplicaciones tanto civiles como militares. Pekín había justificado la medida como un asunto de seguridad nacional en un contexto de rivalidad tecnológica con Estados Unidos. No obstante, el levantamiento de la prohibición llega pocos días después del encuentro entre Xi Jinping y Donald Trump en Busan, Corea del Sur, una reunión que permitió reabrir el diálogo económico entre las dos mayores potencias mundiales.
Estos metales, aunque no están clasificados como “tierras raras”, son fundamentales para sectores estratégicos. El galio se utiliza en semiconductores, LED y paneles solares; el germanio, en fibras ópticas y tecnologías infrarrojas; y el antimonio, en la fabricación de materiales superduros y componentes electrónicos. La Unión Europea los considera materias primas críticas, y China es el principal productor mundial. Su control otorga a Pekín una ventaja significativa en la cadena global de suministros tecnológicos.
Además de esta medida, el Ministerio de Comercio chino anunció una flexibilización de las restricciones sobre el grafito y una suspensión de los exámenes estrictos a los usuarios finales de estos productos. Este gesto, sumado a la reciente decisión de Pekín de mantener reducidos los aranceles a las importaciones estadounidenses y eliminar los derechos adicionales sobre productos agrícolas como la soja, refuerza la imagen de una China dispuesta a estabilizar sus relaciones con Washington. En un escenario global marcado por tensiones comerciales, esta tregua ofrece un respiro a los mercados y podría reequilibrar la competencia por la hegemonía tecnológica.
09/11/2025









