Kiev ha encendido nuevamente las alarmas sobre las prácticas del Kremlin tras denunciar que Rusia ha reclutado a ciudadanos africanos de manera irregular para reforzar sus tropas en la guerra contra Ucrania. Según el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Andrii Sybiha, más de 1.400 personas de 36 países africanos habrían sido incorporadas bajo métodos cuestionables, que incluyen engaños, presiones e incentivos económicos, en lo que califica como un “contrato equivalente a una sentencia de muerte”.
La acusación surge en un contexto de intensificación militar, donde Moscú ha adoptado medidas para facilitar la incorporación de extranjeros a sus fuerzas armadas, permitiendo su servicio durante el período de movilización más allá de los escenarios de excepción o ley marcial. En paralelo, Corea del Norte habría enviado miles de soldados para reforzar el frente, lo que evidencia la estrategia rusa de recurrir a contingentes extranjeros para compensar bajas y sostener ofensivas.
Según Sybiha, los africanos reclutados son enviados mayoritariamente a misiones de alto riesgo conocidas como “asaltos de carne”, donde las bajas son elevadas y la probabilidad de supervivencia escasa. “El mando ruso entiende que no habrá rendición de cuentas por extranjeros muertos, por lo que se les trata como material prescindible”, denunció el funcionario ucraniano, subrayando la gravedad humanitaria de estas prácticas.
Frente a esta situación, Ucrania ha instado a los gobiernos africanos a advertir públicamente sobre los riesgos de enlistarse en el ejército ruso y a aconsejar a sus ciudadanos que eviten estos contratos militares. Además, se recomienda a quienes ya se encuentren en el frente buscar oportunidades de rendirse y convertirse en prisioneros de guerra, opción que garantiza su seguridad bajo los estándares internacionales del derecho humanitario y les permite regresar a sus países de origen.
Asimismo, el Gobierno de Kiev enfatiza que esta estrategia rusa viola normas internacionales y constituye un grave abuso de derechos humanos, reforzando la necesidad de supervisión y cooperación internacional para proteger a los ciudadanos extranjeros atrapados en el conflicto. Mientras tanto, Ucrania continúa documentando los casos y alertando sobre la expansión de este reclutamiento irregular, que involucra tanto a hombres como a mujeres africanas, algunos engañados para trabajar en fábricas de drones bajo falsas promesas laborales.
08/11/2025








