El grupo OCP ha establecido una alianza estratégica con la start-up estadounidense Peregrine Hydrogen para implementar una tecnología innovadora de co-producción de hidrógeno verde y ácido sulfúrico. Esta iniciativa, directamente integrada en la cadena de valor de los fertilizantes, busca reducir costos, minimizar emisiones de CO₂ y consolidar a Marruecos como un actor relevante en el sector del hidrógeno limpio.
OCP, líder mundial en la industria de los fosfatos, avanza hacia un modelo de producción más sostenible mediante la firma de una carta de intenciones con Peregrine Hydrogen. El acuerdo permitirá integrar un sistema de co-producción capaz de generar simultáneamente hidrógeno verde y ácido sulfúrico, dos insumos esenciales tanto para la fabricación de fertilizantes como para otros sectores industriales. Más allá de un simple traspaso tecnológico, el convenio refleja un compromiso conjunto por acelerar la transición energética y reducir la huella de carbono de industrias tradicionalmente intensivas en emisiones.
La tecnología central del proyecto se basa en un proceso de electrólisis de doble salida desarrollado por Peregrine. A diferencia de los métodos tradicionales que producen únicamente hidrógeno verde a partir de electricidad renovable, este sistema combina la producción de hidrógeno con la generación de ácido sulfúrico en un solo proceso. Para OCP, que utiliza este ácido de manera intensiva en la transformación de fosfatos, la integración representa una solución inmediata a dos necesidades industriales, al mismo tiempo que optimiza los costos operativos.
Actualmente, el hidrógeno utilizado en la producción de fertilizantes proviene mayoritariamente del reformado de gas natural, un proceso que emite entre 9 y 12 kg de CO₂ por cada kilo de hidrógeno generado. La adopción de una alternativa limpia permite a OCP no solo “verdir” su cadena de producción, sino también asegurar sus suministros ante la volatilidad del mercado energético global.
El acuerdo también contempla la compra garantizada de los volúmenes de hidrógeno y ácido sulfúrico producidos, ofreciendo a la start-up estadounidense mayor visibilidad financiera y comercial. Para empresas emergentes como Peregrine, este tipo de compromiso puede ser determinante para reducir riesgos de financiación y demostrar la viabilidad industrial de su tecnología. Los responsables del proyecto subrayan que la combinación de innovación tecnológica y experiencia industrial de OCP crea condiciones favorables para competir rápidamente con procesos tradicionales.
Más allá del sector de fertilizantes, esta tecnología tiene potencial para aplicarse en otras industrias de alta intensidad energética, como la metalurgia, el refinado de petróleo o el procesamiento de gas natural, donde tanto el hidrógeno como el ácido sulfúrico son insumos críticos. Ya se contemplan proyectos piloto para evaluar la factibilidad técnica y económica de su adopción en estas áreas, consideradas particularmente difíciles de descarbonizar.
Para OCP, la colaboración con Peregrine se enmarca en una estrategia más amplia de transición energética. El grupo se ha fijado objetivos ambiciosos: cubrir el 100 % de sus necesidades eléctricas industriales con energías renovables para 2030, alcanzar la autonomía hídrica y reducir a la mitad sus emisiones directas e indirectas en la próxima década. Su meta final es lograr la neutralidad de carbono para 2040, consolidando a OCP como un referente mundial en la descarbonización industrial.
La implementación de esta tecnología en Marruecos, cerca de sus principales sitios mineros e industriales, aportaría ventajas estratégicas adicionales: acortar plazos de adopción y fortalecer la posición del país como hub regional de hidrógeno verde. En un contexto donde la transición energética se convierte en un factor clave de competitividad e influencia geopolítica, la alianza entre OCP y Peregrine Hydrogen representa un paso decisivo para conciliar desempeño industrial y sostenibilidad ambiental.
16/09/2025