
La reelección de Pedro Sánchez como nuevo presidente del Gobierno español por parte del Congreso de los diputados nos sitúa ante un nuevo panorama político, económico y social que promete un fortalecimiento de las relaciones bilaterales con Marruecos, como el principal socio estratégico del continente africano.
Para saber más sobre este asunto, el equipo de “Marruecom” ha entrevistado a Said Ida Hassan, analista político e investigador académico en Madrid, quien nos ha compartido su opinión sobre la línea de actuación que se pretende seguir desarrollando en el marco de las relaciones bilaterales entre el Ejecutivo del Gobierno socialista y el Reino de Marruecos.
Así pues, sobre los asuntos cruciales que han vuelto a la mesa de diálogo, tras la confirmación de la presidencia de Sánchez, Hassan nos remite al compromiso de ambos países con el cumplimiento de la hoja de ruta pactada en Rabat, el 7 de abril de 2022. Con esto, los temas pendientes “abarcan desde la posición de España sobre el conflicto en el Sáhara, la delimitación de las fronteras marítimas en el área entre el Sahara marroquí y las Islas Canarias, el control del espacio aéreo sobre el Sahara, hasta la reapertura de las aduanas entre Marruecos y los enclaves de Ceuta y Melilla, y la colaboración en cuestiones de seguridad y migración”.

Concretando un poco más sobre una de estas cuestiones, específicamente sobre el tema del Sahara, nos añade que Marruecos espera “una posición más contundente en apoyo al plan de autonomía propuesto por Marruecos como solución a este conflicto”. Este apoyo puede verse reflejado en “la cesión del control del espacio aéreo del Sahara, hasta la fecha responsabilidad de la empresa pública española ENAIRE, a la administración de la aviación civil marroquí”.
La omisión voluntaria del tema del Sahara en el pacto de gobierno lo dice todo sobre la posición del gobierno de Sánchez, en su nueva edición, sobre este conflicto y sobre el afán de Sánchez de apartar de la política exterior cualquier elemento, incluso su aliado SUMAR
Said Ida Hassan
Por su parte, España espera de Rabat una aceleración en el proceso de apertura de la aduana en Ceuta, así como la reapertura de la de Melilla, tras las tres operaciones de prueba realizadas por los dos países entre los meses de febrero y mayo pasados.
En esta línea, nos interesaba conocer cuáles eran las personas, posiciones y ministerios estratégicos del gabinete de Sánchez que se consideran clave para el fortalecimiento de las relaciones con Marruecos. La respuesta es muy clara por parte de Hassan: “se trata José Manuel Albares, ministro de exteriores, Fernando Grande Marlaska, ministro de Interior, Luis Planas, ministro de Agricultura y Pesca y Margarita Robles, Ministra de Defensa. Todos estos pesos pesados del partido socialista, abogan por una colaboración más efectiva y más profunda con Marruecos”.
Por otra parte, también tenemos en cuenta que el nuevo Ejecutivo de Gobierno lo conforman Sumar y PSOE sin la participación del Podemos, situación que podría provocar cambios en el modo de abordar determinados temas, como puede ser el del Sáhara. A este respecto, nuestro entrevistado, quien también es exdirector de la agencia oficial marroquí MAP, nos confirma que los dos partidos que actualmente conforman la coalición gubernamental, firmaron el pasado 24 de octubre un acuerdo programático para la presente legislatura. En el mismo documento, en ninguna de las dos páginas dedicadas a la política exterior bajo el título «Una España abierta al mundo y con voz propia en el escenario internacional», aparece mención alguna al Sáhara. “La omisión voluntaria del tema del Sahara en el pacto de gobierno lo dice todo sobre la posición del gobierno de Sánchez, en su nueva edición, sobre este conflicto y sobre el afán de Sánchez de apartar de la política exterior cualquier elemento, incluso su aliado SUMAR, que pueda dañar su relación con Marruecos”, añade.
Además, prevé que la salida de Podemos del ejecutivo español podría tener un “impacto positivo en las relaciones entre los dos países vecinos, pues “Podemos estaba asociado a posturas políticas abiertamente anti-marroquíes”.
En esta línea, cabe señalar, que el cambio de criterio por parte de España en cuanto al reconocimiento y apoyo del plan de autonomía para el Sáhara despierta diversas reacciones de la comunidad internacional. Mientras algunos Estados respaldan esta nueva postura, también “podría enfrentar cierta controversia por parte de países como Argelia que respalda, financia y arma al frente Polisario”.
Podría convertirse en un catalizador para una mayor colaboración y entendimiento mutuo entre España, Marruecos y Portugal
Said Ida Hassan sobre la candidatura conjunta del Mundial 2030
Comentado lo anterior, con Podemos en la oposición, existe otro posible inconveniente: los miembros del Ejecutivo son minoría en el Congreso español, lo que puede, de algún modo, implicar cierta dificultad para la puesta en marcha de determinadas políticas. Ante esto, Hassan nos señala que, en efecto, dicha fragilidad podría plantear desafíos en la implementación de políticas a nivel interno, aunque “no supone ningún riesgo para la política exterior, que menos interesa a los partidos independentistas en la actualidad, y para las relaciones con Marruecos”.
Considerando lo afirmado, insiste en que la permanencia de los ministros clave mencionados, los cuales desempeñan un papel fundamental en las relaciones con el Reino, podrían atenuar estos desafíos al mantener una política coherente y buscar respaldo de otras fuerzas políticas en cuestiones particulares.

Por último, no podía faltar una referencia a uno de los eventos deportivos más importante de los próximos años, la candidatura conjunta del Mundial 2030. “Podría convertirse en un catalizador para una mayor colaboración y entendimiento mutuo entre España, Marruecos y Portugal, especialmente si los tres países encuentran formulas innovadoras de cooperación en una organización y participación en el evento”, indica Hassan.
Con esto, corroboramos que son muchas las posibilidades y puertas que se abren para Marruecos con la presencia de Sánchez en el Gobierno español. No obstante, tal y como nos confirma nuestro entrevistado, “dada la volatilidad política en España, la diplomacia marroquí debería actuar de manera rápida” para abordar los temas más prioritarios: la delimitación de las fronteras marítimas entre el Sahara y las Islas Canarias, la gestión del espacio aéreo en el Sahara y la colaboración en asuntos económicos y de seguridad. Sin lugar a dudas, tal y como concluye, “la explotación de esta oportunidad histórica podría ser crucial para consolidar avances y abordar los desafíos pendientes en la relación bilateral”.
Por: Hanae Trola Skalli
30-11-2023









