La Organización de las Naciones Unidas advierte que los últimos ataques israelíes en el campo de refugiados de Jabalia pueden ser considerados «crímenes de guerra». Así pues, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos ha expresado su inquietud al respecto, declarando que los ataques contra el campo de refugiados son completamente “desproporcionados”.

En esta línea, el propio jefe de la Agencia de la ONU para refugiados palestinos, Philippe Lazzarini, reconoce no haber visto jamás algo parecido. «Me impactó el hecho de que todo el mundo allí pedía comida, pedía agua. Vimos a casi todos los niños intentando expresar que necesitaban comer, que necesitaban agua. Nunca había visto algo parecido en Gaza cuando vine antes, después del conflicto», fueron las palabras del funcionario.
Con respecto al número de fallecidos, el portavoz de las milicias de Hamás ha indicado que al menos 195 personas perdieron la vida tras los dos bombardeos israelíes al campo de refugiados.








