El Fondo Monetario Internacional recomienda a Marruecos aprovechar las amplias capacidades que ha desarrollado en los últimos años en el sector de la energía renovable como una oportunidad para abordar los desafíos del cambio climático, tal y como ha publicado en un reciente informe.
Este enfoque podría «contribuir a mejorar la competitividad de las empresas marroquíes en los mercados vecinos que están adoptando la transición hacia la energía verde, especialmente la Unión Europea, y ayudar a crear oportunidades de empleo», señala con más concreción.
Asimismo, el FMI también añade que el fuerte terremoto que afectó a las regiones del sur del Reino el 8 de septiembre, destaca la importancia de fortalecer la preparación y la capacidad del país para resistir desastres naturales, incluyendo los causados por el cambio climático.
En esta línea, añade que el Reino «está entre los países del mundo más afectados por la escasez de agua, y la falta de agua representa un serio obstáculo para la ambición del país de cambiar a un nuevo modelo de desarrollo».

Por otra parte, el mismo documento confirma la aprobación por parte del Consejo Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional de un acuerdo de 18 meses de financiación para Marruecos en el marco del Fondo de Capacidad de Resiliencia y Sostenibilidad. Este acuerdo tiene como objetivo fortalecer la resiliencia del país frente al cambio climático y aprovechar las oportunidades derivadas de la reducción de emisiones de carbono.
En este contexto, es importante resaltar que el proyecto de ley presupuestaria para el año 2024 propone reducir el impuesto sobre el valor añadido aplicado a la producción de energía eléctrica de fuentes renovables, que actualmente es del 14%, al 12% a partir del 1 de enero de 2024 y luego al 10% en el año 2025. Este cambio se enmarca en los esfuerzos para mitigar los efectos del cambio climático y promover el uso de energías renovables.






									 
					


