
17-07-2020
En el marco de la operación excepcional tras la apertura de fronteras aéreas y marítimas de Marruecos, que beneficia a los marroquíes residentes en el extranjero (MRE), a los ciudadanos varados, y a extranjeros residentes en el Reino, se ha informado que las salidas desde Génova y Sète, se han visto fuertemente afectadas por la falta de organización ante la gran concurrencia de viajeros.
El diario “La República”, informó que en Génova cientos de coches esperaban para abordar, lo que interrumpió severamente el tráfico urbano en Lungomare Canepa, señalando que “Si 60 coches realmente abordaron, otros 500 vehículos alineados intentaban hacer lo mismo”. En este sentido, se evidencia la necesidad de la presencia de autoridades que promuevan el orden público.
El retraso, según indicó el diario, se basa en que un gran número de pasajeros no obtuvo su prueba de detección de Covid-19, el cual era un documento requerido por las autoridades marroquíes. A pesar de realizar pruebas en el lugar para que estas personas pudieran abordar rápidamente, el conflicto en la movilización fue inevitable.
En el puerto de Sète, según el periódico “Liberation”, se presentaron problemas similares; se informó que una gran cantidad de MRE esperaban allí la oportunidad para poder embarcar, sin embargo, muchos de ellos carecían de información en lo referente a los requisitos y los billetes, demostrando falta de orientación en este proceso.