
03-07-2020
El ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y marroquíes residentes en el extranjero, Nasser Bourita, señaló ayer jueves, en una conferencia de prensa, que el hecho de que Amnistía Internacional (AI) no haya presentado pruebas sobre las denuncias contenidas en su último informe publicado el pasado 22 de junio, lleva a Marruecos a cuestionar el contexto de este informe. Estas pruebas ya han sido solicitadas a AI, sin obtener respuesta alguna hasta el momento.
En la rueda de prensa en la que también participó el ministro de Estado encargado de los derechos humanos, Mustapha Ramid, añadió que esta organización deberá asumir su responsabilidad si no dispone de las pruebas necesarias, y deberá dejar de adoptar ese enfoque, que se basa únicamente en la difamación sin pruebas.
«Si esta organización no quiere proporcionar a Marruecos las pruebas que apoyan su informe, deberá presentarlas al mundo en una conferencia de prensa» insistió Bourita, señalando que es posible probar lo que esta organización pretende sobre la infiltración del teléfono móvil de un periodista-aprendiz, y esto de manera científica, recurriendo a los laboratorios especializados.
El ministro hizo hincapié también en que lo que está sucediendo ahora se suma al tratamiento «no profesional» que Amnistía Internacional ha ejercido contra Marruecos durante años, a través de la focalización continua y sistemática del Reino a través de informes y datos publicados por esta organización.
El funcionario exaltó la continua apertura de Marruecos a las organizaciones internacionales, ya sean gubernamentales o no gubernamentales, y afirmó que el Reino exige que estas organizaciones trabajen con profesionalismo y credibilidad, solicitando que elaboren sus informes en el marco de un diálogo y sobre la base de procedimientos, pruebas y preguntas claras y concretas.