El presidente francés, Emmanuel Macron, junto con líderes africanos y en un encuentro reducido, conmemoró el 80° aniversario del Desembarco de Provenza, un evento menos conocido que el de Normandía pero crucial en la liberación de Europa durante la Segunda Guerra Mundial. Este acto sirvió para rendir tributo una vez más a los combatientes de las antiguas colonias francesas.

El 15 de agosto de 1944 marcó un momento decisivo cuando 100,000 soldados, principalmente de Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, desembarcaron en las playas del Var, seguidos por más de 250,000 franceses de la «Armada B», compuesta en su mayoría por tropas de las colonias africanas de Francia. Estas fuerzas liberaron Toulon y Marsella en menos de dos semanas, un logro que no solo ayudó a liberar Europa sino que también permitió a Francia recuperar su estatus en la comunidad internacional tras la humillación de 1940.
En una ceremonia emotiva en la necrópolis de Boulouris, en el Var, Macron destacó la diversidad y el compromiso de la «Armada de la Nación», refiriéndose a los soldados no solo como franceses sino como representantes de diversas partes del imperio francés, desde la Casamance hasta Madagascar. «Estos hombres, que quizá nunca habían pisado la Francia continental, fueron fundamentales en nuestro esfuerzo de guerra», afirmó Macron, subrayando la importancia de reconocer y recordar su sacrificio en la historia francesa.
Este homenaje también tiene un carácter de apoyo a los países africanos, con los cuales Francia comparte un legado de lucha y cooperación. El presidente camerunés Paul Biya recalcó la importancia de la colaboración en la defensa de los valores universales de paz y justicia.
La ceremonia también incluyó la entrega de la Legión de Honor a seis veteranos, reconociendo sus contribuciones a la libertad de Francia. A pesar de las condiciones meteorológicas adversas, que cancelaron algunas actividades planificadas, el evento resaltó la contribución africana en la historia militar francesa y reafirmó los lazos entre Francia y sus antiguas colonias.
Con la presencia reducida de líderes africanos este año, el evento refleja una dinámica política cambiante, aunque la presencia de representantes de países clave como Camerún, Togo y Gabón subraya la continuidad de las relaciones históricas. A pesar de la ausencia de algunos países recientemente distanciados de París, la ceremonia de Provenza sigue siendo un punto de encuentro para reafirmar compromisos y recordar un pasado compartido.
15/8/2024