El último informe publicado el día de ayer por la plataforma virtual Euroreporter señala que Irán está trabajando para ampliar sus conexiones y su red militar, llegando a vincularse hasta con el Frente Polisario.
En este sentido, el medio señala que, desde el inicio de la guerra en Gaza, varios grupos militares, respaldados por Irán, han intensificado sus acciones hostiles en contra de Israel. A este respecto, destaca Hezbollah, los hutíes de Yemen, las milicias chiítas de Irak, etc.
En el continente africano, informes de servicios secretos y de investigadores financieros revelan que Teherán ha expandido su influencia entre algunos grupos sin conexión aparente con el fundamentalismo islámico. Este es el caso de las milicias del Frente Polisario, con base en Tinduf, los cuales, desde el año 2020, han reanudado la lucha contra Marruecos, contrariando las indicaciones de las Naciones Unidas de apoyar el plan de autonomía del Reino, con respecto a la región del Sáhara.
Con esto, el mencionado respaldo de Hezbollah al Frente Polisario ha generado más tensiones, causando la ruptura de las relaciones entre Irán y Marruecos en 2018. Concretamente, se trata de un apoyo se suministros, armamento y entrenamiento militar por parte del grupo terrorista iraní.

“Los miembros del Polisario en el Sáhara Occidental han recibido misiles tierra-aire y drones de Teherán. Hezbollah, un aliado de Irán, ha instalado campamentos en Argelia donde entrena a los combatientes del Polisario”, señala el Ministro de Asuntos Exteriores marroquí, Nasser Bourita.
En esta línea, cabe señalar que, en la actualidad, la colaboración entre Irán, Hezbollah y el Frente Polisario se ha extendido incluso a través de una red Hawala, un método antiguo para transferir dinero sin pasar por bancos legales. Esta red, que opera desde España y los campos de Tinduf en Argelia, mantiene vínculos estrechos con el Polisario, Irán, Líbano y Hezbollah, facilitando la financiación de actividades ilícitas, tal y como recoge Euroreporter.
En este contexto, cabe añadir que la situación en la región ha empeorado desde que Marruecos firmó el Acuerdo de normalización de las relaciones con Israel, convirtiéndose el Sáhara en un foco clave de los intentos iraníes de desestabilizar la región. Además, el Polisario se ha vuelto más útil para Irán en esta estrategia, especialmente después de que Estados Unidos reconociera la marroquinidad de la región.
Entre los últimos acontecimientos de la zona, se encuentra el reciente lanzamiento de cohetes en zonas residenciales de la ciudad marroquí de Esmara por parte del Polisario, causando un fallecido y dos heridos graves.
Con esto, la colaboración entre Irán y grupos aparentemente no relacionados, como puede ser el caso que planteamos del Frente Polisario, plantea serias preocupaciones sobre la capacidad de Irán para expandir su influencia a través de diversas redes y milicias en el escenario geopolítico.