Cerrar El Menú
MarruecomMarruecom
  • Portada
  • Política
  • Economía
  • Internacional
  • Cultura y Ciencia
  • Deportes
  • Entrevistas
  • vídeo
  • Opinión
العربــيــة Francais English

Últimas noticias

Rabat: Hammouchi se reúne con la directora general de la Seguridad Interior francesa

12 septiembre 2025

El homicidio de Charlie Kirk: La caza continúa y la fragilidad democrática de EE.UU. queda al descubierto

12 septiembre 2025

GPC Papier et Carton convierte Mohammedia en un polo industrial con proyección verde y tecnológica

12 septiembre 2025

La Justicia como guillotina: la ofensiva final de Erdogan para decapitar a la oposición turca

12 septiembre 2025

Murcia anula el programa de la lengua árabe y cultura marroquí tras la presión de Vox

12 septiembre 2025
Facebook X (Twitter) Instagram YouTube RSS
24/24
  • Rabat: Hammouchi se reúne con la directora general de la Seguridad Interior francesa
  • El homicidio de Charlie Kirk: La caza continúa y la fragilidad democrática de EE.UU. queda al descubierto
  • GPC Papier et Carton convierte Mohammedia en un polo industrial con proyección verde y tecnológica
  • La Justicia como guillotina: la ofensiva final de Erdogan para decapitar a la oposición turca
  • “Ecos en la nieve” de Mohamed El Morabet: una novela poética
  • Murcia anula el programa de la lengua árabe y cultura marroquí tras la presión de Vox
  • Zapad 2025: Rusia despliega su poderío hacia Occidente, despertando fantasmas y amenazas nucleares
  • Ataque a Catar: El Consejo de Seguridad en la encrucijada entre la condena y la parálisis ante la audacia israelí
viernes, septiembre 12, 2025
Facebook X (Twitter) Instagram YouTube RSS
MarruecomMarruecom
العربــيــة English Francais
  • Portada

    España cancela un contrato con Huawei por motivos de seguridad

    30 agosto 2025

    Melania Trump lanza un concurso presidencial en torno a la inteligencia artificial 

    26 agosto 2025

    El liderazgo marroquí en seguridad nuclear recibe reconocimiento en Washington

    24 agosto 2025

    Marruecos: La UIR y Cisco se asocian para crear un centro de excelencia en IA y ciberseguridad

    14 agosto 2025

    La AMMPS desmiente supuesta escasez de más de 600 medicamentos para enfermedades crónicas

    13 agosto 2025
  • Política

    Francia en la encrucijada: La caída de Bayrou expone la fragilidad de Macron y enciende alarmas económicas

    8 septiembre 2025

    Sarkozy propone vincular la entrega de visados argelinos a la aceptación de repatriaciones

    4 septiembre 2025

    Xi y Putin convierten la cumbre de la OCS en Tianjin en un frente común contra Occidente

    1 septiembre 2025

    EE.UU. reafirma su respaldo a la soberanía marroquí y destaca oportunidades de inversión

    30 agosto 2025

    Expertos franco-suizos critican el enfoque parcial de Le Monde en su tramiento al Reino de Marruecos

    26 agosto 2025
  • Economía

    GPC Papier et Carton convierte Mohammedia en un polo industrial con proyección verde y tecnológica

    12 septiembre 2025

    Business Insider: Marruecos, entre los destinos turísticos más atractivos del mundo en 2025

    11 septiembre 2025

    Thunes incorpora al mercado marroquí los pagos instantáneos en dirhams

    11 septiembre 2025

    Rabat, crisol de la ambición industrial árabe: Tejiendo la red de la integración regional

    11 septiembre 2025

    Marruecos se proyecta como el gran ‘hub’ logístico de África para rediseñar el mapa de la cooperación Sur-Sur

    11 septiembre 2025
  • Internacional

    La Justicia como guillotina: la ofensiva final de Erdogan para decapitar a la oposición turca

    12 septiembre 2025

    Murcia anula el programa de la lengua árabe y cultura marroquí tras la presión de Vox

    12 septiembre 2025

    Ataque a Catar: El Consejo de Seguridad en la encrucijada entre la condena y la parálisis ante la audacia israelí

    12 septiembre 2025

    Brasil en el espejo de la justicia: Condena histórica a Bolsonaro por intento de golpe desata una tensión geopolítica sin precedentes

    12 septiembre 2025

    Crisis sin precedentes: Catar exige juicio a Netanyahu y pone en jaque su mediación tras un ataque ‘terrorista de Estado’ en Doha

    11 septiembre 2025
  • Cultura y Ciencia

    “Ecos en la nieve” de Mohamed El Morabet: una novela poética

    12 septiembre 2025

    Una exposición en Washington destaca las identidades artísticas marroquíes y árabes

    11 septiembre 2025

    Rabat acogerá en octubre la exposición internacional The Golden Brush

    11 septiembre 2025

    Marruecos, en el crisol del cine: La narrativa femenina como vértice de la paridad y el diálogo global

    11 septiembre 2025

    Educación superior: Huawei Marruecos impulsa la formación avanzada de doctorandos en China

    10 septiembre 2025
  • Deportes

    Sergio Ramos elogia a Achraf Hakimi y lo sitúa entre los mejores del mundo

    11 septiembre 2025

    El Sevilla mantiene vivo su interés por Hakim Ziyech y busca fórmulas para ficharlo

    8 septiembre 2025

    Marruecos firma un camino perfecto rumbo al Mundial 2026

    8 septiembre 2025

    El rugido de Alcaraz resuena en Nueva York: Destrona a Sinner y reclama la cima del tenis mundial

    8 septiembre 2025

    Marruecos asegura su clasificación al Mundial 2026 tras golear a Níger

    5 septiembre 2025
  • Entrevistas

    Entrevista: “La estrategia diplomática de Argelia … arrastra a la región hacia la incertidumbre”

    2 septiembre 2025

    Farid Othman-Bentria sobre la narrativa antimigrante en España: “Un enemigo de la diversidad es un enemigo del progreso”

    6 agosto 2025

    España rumbo a elecciones anticipadas: el escándalo Koldo precipita la caída del sanchismo y allana el camino a un nuevo gobierno del PP

    30 junio 2025

    La tregua entre Irán e Israel da un respiro a los mercados

    24 junio 2025
    Ministro de Relaciones Exteriores de la República de Panamá Javier Martínez-Acha Vásquez

    Entrevista: Panamá y Marruecos estrechan lazos como ejes estratégicos entre África y América

    23 junio 2025
  • vídeo

    Marruecos y Francia demuestran su buena relación comercial y política en el Salón Internacional de la Agricultura

    22 febrero 2025

    Francia: Policía de Vénissieux captada usando fuerza excesiva durante arresto

    5 junio 2024

    Policía argelina fumiga a mujeres manifestantes en protesta pro-Palestina

    16 abril 2024

    Cápsulas informativas de Marruecom – Políticas de migración en la UE

    12 abril 2024

    Los podcast de Marruecom. Hoy Juan Antonio Tirado, periodista Y reportero de Informe Semanal RTVE

    10 abril 2024
  • Opinión

    ¡Venezuela no es amenaza, es esperanza! Desmontando la agresión contra Venezuela

    1 septiembre 2025

    Respuesta a Le Monde: Hacia una compresión equilibrada del modelo marroquí en el Magreb

    31 agosto 2025

    Odio sin fronteras

    14 agosto 2025

    Unas vacaciones en España para una perpetuidad en Tinduf

    8 agosto 2025

    Murcia, ejemplo de cuando el odio eclipsa la convivencia

    16 julio 2025
MarruecomMarruecom
Casa»Cultura y Ciencia»“Ecos en la nieve” de Mohamed El Morabet: una novela poética

“Ecos en la nieve” de Mohamed El Morabet: una novela poética

12 septiembre 202518 Minutos de Lectura
Compartir
Facebook Twitter WhatsApp Telegrama Correo electrónico Copiar Link

De entre los actuales escritores marroquíes que escriben en español desde la diáspora y España, está el joven escritor Mohamed El Morabet, un autor de madera que, en cuestión de pocos años, ha creado, y lo sigue haciendo, un lugar especial y merecido en la actual literatura marroquí deexpresión española y por extensión en la literatura hispánica. Empezó su carrera creativa pesando y pisando fuerte en clave novelística. Su primera novela, Un solar abandonado, fue un éxito de lectura y crítica, una inflexión casi vanguardista, como comentó no sin acierto algún que otro crítico en el momento de su publicación allá por 2018. Su segunda novelasalida en 2023,El invierno de los jilgueros, ratifica con mérito la citada apreciación porque consiguió por ella un famoso galardón español, Premio Málaga de Novela,que convoca y otorga el excelentísimo Ayuntamiento de la misma ciudad. Otro tanto pasa con su relato “Siete mares” con que ganó ex aequo con Antonio Cano Rodríguez el Premio Internacional de Relatos Hammam Al Ándalus en 2025.  Esta semana se ha editado su última y tercera novela: Ecos en la nieve, en la famosa editorial Galaxia Gutenberg, siendo, que yo sepa,elúnico marroquí y magrebí en publicar en ella.

Es nueva novela no por ser obviamente novedad editorial, sino principalmente por su vocación novedosa en óptica escritural,comparada en prisma histórico-literariocon su obra anterior. Una encarnación del compromiso del autor con su quehacer artístico y de su capacidad para experimentar fórmulas nuevas en su lenguaje novelesco. Lo espor su contenido y creación semántico-imaginaria, pero esencialmente por su formay plasmación estilística y compositivo-enunciativa en disímiles aspectos. Conviene, antes de argumentar y presentar, aunque a grandes trazos, mi lectura personal, resumir aproximativamente la diégesisde la novela para poner al tantoprimeroal lector y preparar después la pista para nuestro breve análisis, objeto principal dela presente reseña.

La acción de Ecos en la nieve transcurre en un invierno de mucho frío y nieve en medio de un bosque de cedro, muy lejos del mar y de la ciudad. La protagonista, una niña de diecisiete años, sin nombre ni identidad, estáen una chabola avanzadamente embarazada y con síntomas de un eminente parto,con dolores en todo el cuerpo, espasmos interiores, contracciones musculares, dificultades para vestirse, calzar, levantarse y moversepara ir por leña, preparar fuego y comida.Muy sola, recibe continuamente las molestas visitas de animales (gato, lagartija, hormigas, abeja, etc.)siempre al ritmo de las gotas constantes que anegan de agua a la choza, y raramente los humanos; estos solo pasan a su lado indiferentes o, en caso de sentir por sorpresa su existencia, la rehúyen tratándola con deprecio. Abatida moralmente y extenuada físicamente, se pone a relatar su historia anteriortranscurrida en su aldea: la vida cotidiana rural, agresiva e incomunicada de su familia, su relación íntima con la tía que la inicia a la viday a la libertad,la fuga de esta última de la casa, el abuso sexual incestuoso durante tres años a la que fue sometidapor sus dos tíos gemelos, su intento de matar con un cuchillo a uno de ellos, su fuga y su correspondiente llegada a la chabola. Al final, ya a punto de dar luz, recibe la visita de una anciana, dueña de la misma choza, quien la asiste en el parto. Avisada de la llegada de los suyos, un hombre de bigote negro y dos gemelos, tuvo que continuar sola, sin su hija que nació muerta, su fuga hacia el nortecontinuando la aventura anterior de su tía/madre.

Como es de notar, El Morabet ambienta su novela en el mundo rural. Es la primera vez que lo hace, lo cual conlleva un evidente desafío, dada la dificultad que supone para un autor esencialmente urbano como él la narración con conocimiento de causa de la vida sicológico-social y geográfica del mundo del campo. Se nota una acertada descripción de la fauna y flora de la geografía imaginaria, un agudo y sutil espíritu de observación, frutos ambos probablemente de una investigaciónhecha al respecto antes de acometer la labor creativa. El novelista de Alhucemas escribe impersonalmente, los personajes son anónimos y sin identidad étnica o nacional, no ofrece puntualizaciones explícitas sobre su geografía imaginaria, muy acostumbrado, como lo fue en sus dos anteriores novelas, a sortear de manera premeditada descripciones de vocación localista, indigenista o folclórica. Una forma indudable de asumido universalismo literario. No por azar, nunca ha cejado en considerarse un escritor a secas que solo sabe contar historias y no lugares o naciones. No obstante, no sé si consciente o inconscientemente, le escapan indicios que ayudan a hablar, aunque sin certeza, de un supuesto ambiente norteafricano, cuando no rifeño, sobre todo en orografía, fauna, flora, hábitos y cultura: pequeñas colinas, zocos semanales, cedro, chumberas, lentisco, jaiques, botijos de agua con cazo en las puertas, un poema de una poeta local, etc. La imprecisión espacial de la que hemos hablado se debe vincular, en mi opinión, con el lenguaje poético de la novela. Es, entre otras,la esencial razón de ser de la novela.

El tema del incesto es neurálgico en Ecos en la nieve. Es, en efecto, un topoi convencional bastante abordado en la literatura universal e hispánica, pero infrecuente, tiendo a pensar, en las literaturas marroquíes actuales. Me es difícil hacer ahora comparatismo literario para evaluar detenidamente el tema en cuestión. Me limito a dos iniciales y precisas observaciones que explican el planteamiento individual de El Morabeta este tenor. En primer lugar, no encontramos ninguna justificación explícita y causal del abuso sexual que los tíos gemelos someten a su hermana y luego a su sobrina. Se envuelve en el misterio y la incertidumbre. El incesto no se acometepor cuestiones de androginia o de persecución de la unidad original, tampoco por perversión anormal puramente sexual, como es común en mucha de la ficción universal. La agresividad animalesca que se atribuye a los agresores da asuponer que ellos actúan probablemente por incontinencia sexual y vacío sentimental en un ambiente rural altamente primitivo, de escasa mezcla de género y de máxima precariedad social. El silencio también enigmático del abuelo y su complicidad al respecto explica asimismo que los dos agresores gozan de impunidad y actúan en un marco autoritario de poder omnímodo, con una dimensión añadida muy de actualidad: ser violadores de menores. La reacción de la víctima, una niña de solo catorce años, matando a uno de ellos con un cuchillo y escapándose después de la casa y la aldea, tiene todas las trazas de ser una resiliencia femenina, tal vez feminista, avant la lettre y precoz contra la injusticia y la autoridad masculina. No afirma otra cosa la protagonista cuando confiesa hablando con la niña que tiene en su vientre: “Por esto mismo, cariño, no quiero compañía. Aunque este silencio me derrumba, ya lo intuyes.Y sé que lo puedo resistir. Lo resistiré. Lo resistiremos”. Resiliencia que asume también contando su historia a la misma hija-bebé, primero por catarsis espiritual y liberación personal, y segundo, por pruritos de memoria, de dejar constancia de su calvario, de la injusticia del destino y de su lucha contra el poder patriarcal/familiar y su correspondiente libertad como mujer.Esta aspiración a liberarse y ser libre se repite como metáfora obsesiva en la novela porque la protagonista suele continuamente soñar con ir “a la isla desierta. A su océano. Al mar y sus olas”.

Salta a la vista una baza positiva en la narración, el sentimiento trágico desde donde se narra la historia y la implicación subjetiva de la narradora en ella lamentando su doble adversidad, vivida tanto en la aldea,siendo objeto de violación sexual, como en la chabola a merced de la fragilidad física y moral.No por azar, ella es la principal protagonista del relato en términos de enunciación ilocutiva y de presencia en la diégesis,y en igual medida, objeto de admiración por parte del narrador omnisciente y también del lector.

Según se ha invocado al principio de estarecensión, es en la configuración formal donde se manifiesta con más intensidad la vocación novedosa de Ecos en la nieve mediante una nueva experimentación escritural, una nueva manera de escribir, muy peculiar en autores que tienen concienzudo compromiso con el lenguaje del que deriva siempre esa imperiosa necesidad de ensayar cauces distintos y maneras no acostumbradas en su creación de mundos posibles. El Morabetse aleja ahora del culturalismometaliterario e intertextual muy dominante en Un solar abandonado y El invierno de los jilgueros e inicia otro registro escritural basado en la poesía, el lirismo narrativo y la imprecisión en la información, aspectos que contribuyen a aportar más calidad retórico-estilística a su novelística y a crear por ende más placer/suspense en el lector. Estamos entonces ante una nueva poética narrativa. Veamos, en concepto de ilustración y a vuelapluma,algunos de sus puntos sobresalientes a escala macrotextual.

Ecos en la nieve es una novela corta al igual que Un solar abandonado y más breve, sin embargo, que El Invierno de los jilgueros.  Tiene una estructura compositiva distinta de ambas: no está compartimentada en partes o capítulos, es como un todo que se ofrece naturalmente a una lectura continua, sin interrupción o descanso. Constituye, si se quieren otros términos, un gran poema, un largo poema cuyo lirismo atrapa al lector desde el principio hasta el final. Así ha sido al menos mi caso, mi experiencia lectora. La tuve que terminar de un tirón y me costó una mañana y pico. La segunda lectura, discontinua esta vez, me llevó más, pero menos de un día entero.  Los pasajes más poéticos son estos sintagmas oracionales, a veces unimenbres, a veces bi o trimenbres, largos o cortos,mayoritariamente sin verbos ni conectores, las demás, que tienen apariencia más de versos que de frases normales, por su evidente verticalidad formal y,sobre todo, por su poder sugestivo y metafórico. Poder que es subrayadoa su vez por el espacio tipográfico en blanco que los separa del texto normal propiamente dicho, es decir, lineal, declarativo y narrativo. A parte de ser una manera minimalista de narrar, configura un silencio semántico que es parco en formación, acelera el ritmo de la narración e involucra más al lector a prestar atención al contenido sugerido y a sacar sus propias consecuencias y conclusiones.He aquí algunos ejemplos:

Chorreo de agua.

Suspiros.

Entrechoque de metales.

Quejidos.

Una gota al baúl. Una gota al suelo.

Un estornino negro sobrevuela la copa del cedro.

Veintidós gotas al baúl. Veintitrés gotas al suelo.

El último pasaje encierra una significativa repetición encarnada en su aparente estructura paralelística. Si nos atenemos al plan macrotextual siempre, constituye otro proceso retórico, otro dispositivo de la impronta poético-lírica que impregna la novela. Como la repetición es esencial en la poesía, se mantienecon constancia en la ficción y detiene la acción narrativa y su ritmo. Se nota particularmente en muchas de estas escenas en que el narrador omnisciente describe con minucia y atención la actuación de la mujer dentro de la choza y sus dificultades de todo tipo, así como la de los animales (un gato, una lagartija, un zorzal, una avispa, etc.) que entran en la choza alterando el mundo humano de la mujer, rompiendo su soledad y generando su disgusto. No son escenas absolutamente semejantes, pero provocan en el lector esta impresión de estancamiento narrativo, de ralentización rítmica del relato y de estar delante de escenarios reiterados porque se relatan iguales acciones y semejantes comportamientos. He aquí solamente dos casos:

Por el hueco de la persianarota asoma la cabeza de un gato.

Segundos después, el gato entra por la puerta entornada. Un paso y escudriña la choza. Otro, paso y se detiene, alza la cola y a las orejas. Olisquea frenético alrededor. Teje movimientos en varios sentidos, aleatorios. Olfatea el hedor que emana de la manta y el jaique. Se echa para atrás. Se acerca y husmea el baúl. Salta del suelo y da cuarto pasos encima. O, en su caso, ocho. Cuatro y cuatro. […] Del baúl salta a la colchoneta, golpetea con las garras el bulto que forman los pies de la mujer debajo de la manta.De la colchoneta se desvía a los zapatos y al bidón de agua. De los zapatos se traslada a la silla, intenta alcanzar la mochila desde el suelo. Sube a la silla, olfatea, y enseguida salta a la mesa. Pisa el plato de acero esmaltado que cae al suelo. Levanta polvareda. […]

El gato reacciona más al eco que a la voz destemplada de la mujer. La mira curioso un instante y se da la vuelta. Desde el quicio de la puerta, el gato echa un último vistazo al lugar y a su huésped. Y se marcha. Como pidiendo perdón.

 

Por el hueco de la persiana rota irrumpe una avispa impulsada por el viento. Asustada. Huye del frío. Se guarece de la lluvia. […]Se refugia en la atmósfera densa de la choza. Una reina que no se explica cómo sobreviveal invierno, cómo sortea esa latitud. Sola. Sin colmena, sin séquito, desprovista del auspicio de la compañía de las demás de su especie. Vuela muy bajo en el aire tibio. Casi a ras de la tierra. Inquieta. La densidad que genera la temperatura en el interior de la choza aligera su cuerpo. Al cabo, asciende y se posa en la hoja afilada del hacha, recorre el hierro frío y desciende por el mango de madera. Se detiene en la soga. Penetra una antena en el esparto insípido, reseco. La retira de inmediato y bate las alas. Círculos concéntricos, geometría abstracta, la naturaleza y su sabiduría. Se acerca al mismo hueco por donde entró. Y se marcha. Como pidiendo perdón.

Una simple y detenida comparación entre los dos fragmentos, al igual que con los demás de igual naturaleza en que intervienen la lagartija y el zorzal, se constata la existencia de una estructura permanente constituida por tres motivos: uno inicial, la entrada en la choza, otro intermedio, pero amplio, que cubre la acción de los animales en medio de la choza, y el último que acaba con la despedida y la expresión: “como pidiendo perdón”. De igual modo, se continua el realismo minimalista anteriormente señalado,pero ahora más acentuado a través de frases cortas y yuxtapuestas. Un conjunto que imprime lirismo a la lengua novelesca y le inyecta dinamismo. Hibridando más los registros, se detecta también otra vertiente de realismo,particularmente en los pasajes en que intervienen tanto la lagartija como el gato. Es detenidamente detallista, microscópico, casi naturalista. Un penetrante espíritu de observación de la realidad descrita en la ficción.  A un lector poco avezado sería ripio narrativo, una expansión innecesaria, acaso inútil para la acción novelesca. Es,sin embargo, ejemplo de prosa pura y deshumanizada,si queremos volver a los términos de las vanguardias artísticas de principios del siglo XX, más volcada sobre las cosas y la correspondiente descripción objetiva y conductista de la acción y comportamiento de los personajes. Obedece, forzando un poco la apreciación, a lo quepredicaba allá a mediados del siglo pasado Alain Robbe-Grillet: narrar las cosas y nada más que las cosas. Tampoco sucumbe a veleidades de positivismo documental. A mi humilde parecer, tiene primordialmente en Ecos en la nieve doble funcionalidad narrativa. La naturalidad y libertad con que actúan los animales, digamos el reino animal, hace de contrapeso al régimen nocturno y trágico que domina en el área de lo humano, vinculada con la angustia y soledad de la protagonista violada.  Una sutil unión armónica de los contrarios. No deja al mismo tiempo de actuar como procedimiento de amenización de la narración suavizando su carga dramática. La segunda tiene que ver con el discurso y, por eso, es de alcance retórico y lúdico. Consiste en convertir el contenido en forma, el significado en significante.Mucho ingenio formal que transforma un simple hecho cotidiano en objeto de expansión narrativa y textual. La descripción, en este caso, se torna en excusa para acentuar el lenguaje que no encuentra inconveniente en ser objeto de acrobacia verbal de cariz distractivo en términos de recepción.Es, por eso, una modalidad no anunciada de cautivar al lector,produciendo en él esta sensación de lo imprevisto que llama Barthesel placer del texto. Tal vez me equivoque en la valoración, pero confieso haber disfrutado leyendo estas escenas en cuestión que me parecen inéditamente espléndidas.

Por cierto, Ecos en la nieve es dual en su enunciación narrativa. Un primer relato principal en que se relata el presente de la historia mediante un narrador extradiegético omnisciente y un segundo relato correspondiente al pasado de la historia a través de una narración homodiegética.Este último es un relato especial y muy vivido porque es narrado en primera persona con una considerable dosis de lirismo emocional en que se establece cierta confusión entre expresión y sentimiento. Es el discurso personal que acomete la principal protagonista, la mencionada mujer niña de catorce años,que se enrola en un largo soliloquio, hablando consigo misma, preguntándose y contestándose. Se dirigía siempre dialogando con su hija-bebé que tenía en el vientre, pero de esta solo llegaban ecos y no palabras. Estamos ante un flujo de conciencia muy significativo en óptica semántica en el desarrollo de la novela, por no decir, su piedra neurálgica porque en ella se relata el calvario sufrido por la protagonista. Un relato que ella narra desde dentro, no podía ser de otra manera,por haberlo vivido en carne propia y determinar por consecuencia su estado actual de soledad,desamparo y agobio físico en una choza perdida en el bosque.El diálogo/soliloquio es de gran profundidad emocionalen Ecos en la nieve y, por supuesto,la implicación personal de la narradora en lo que cuenta hace más conmovedor su relato. Las palabras y los hechos se confundencon espontaneidad, la expresión y el sentimiento se involucran en acentuada proporción. Resultado: una prosa lirica considerablemente intimista a cuyo través se vehiculan sentimientos ambivalentes, particularmente de angustia acompañada, por un lado, de voluntad catártica y de superación,y por otro, con pruritos de contar la misma historia, nombrarla poniendo en evidencia la injustica del mundo y la incapacidad humana para ponerla frente o término. Este flujo de conciencia enunciativo utilizado por el autor por primera vez forma continua, si no me equivoco, es muy oportuno a la situación narrativa y ha podido reflejar con maestría la dura y trágica realidad humana que en ella se declara.

Ecos en la nieve tiene mucho poder de sugestión y constante imprecisión en información, descripción de personajes, espacio y tiempo, etc.Ambos rasgos derivan ciertamente y otra vez de la poeticidad que caracteriza a la novela. Todos los personajes son anónimos y sin identidad. Su sicología y comportamientos se describen sobre la marcha en la acción narrativa y según su actuación en la trama novelesca.  Tampoco se dan datos explícitos, como he subrayado con anterioridad, sobre el espacio en que se desarrollan los hechos y en caso de que existanson escasos. ElMorabet espoco afecto al costumbrismo etnográfico. Se infiltran indicios, pero a escondidas y detectables solo entre líneas por el lector. Hay incluso enigma y misterio en la actuación de algunos personajes como, por ejemplo, el abuelo y los dos tíos gemelos. Otro ejemplo simple de imprecisión: ir al norte en la novela es sinónimo de viajar, pero en el fondo significa emigrar hacia un norte donde existen campos de fresa. Un norte que solo puede ser España porque,si consideramos los pocos indicios de la ficción novelesca,entendemos que la acción transcurre en un ambiente culturalmente norteafricano, particularmente rifeño. Hay muchos aspectos de este tipo que podemos espigar ad infinitum, pero no viene a cuento hacerlo aquí en esta breve reseña.  Lo que sí es cierto es que el narrador y, por supuesto, el autor real lo hace adrede, con conocimiento de causa y concienzudamente, algo muy propio de un creador demiurgo que maneja bien los resortes de su novela urdiéndolotodo a su forma y según la intención por él apuntada. Intención que es, sin lugar a duda,crear ambigüedad, sentar la duda en la narración, abrir la novela hacia la incertidumbre y la indecisión, a lo cervantino, a la manera de los grandes autores.

Puedo seguir abordando los aspectos microtextualesy demás fenómenos para alargar la presente reseña. La novela es muy densa y da mucho de sí. No es esta mi intención aquí. Termino concluyendo que Ecos en la nieve de Mohamed El Morabet es una novela novedosa,enjundiosa y misteriosa, intensamente poética, inequívocamente universal y rabiosamente literaria. Una novela, en definitiva, mayúscula de un novelista proteico y de gran fuste que tiene todas las trazas de seguir sorprendiéndonos en el futuro literariamente hablando. La lectura de Ecos en la nievees,por eso, más útil y agradable, más imprescindible y placentera.

 

Mohamed Abrighach

Hispanista y universitario

 

12/09/2025

Tangermed Passagers
Principal
Compartir. Facebook Twitter WhatsApp Telegrama Copiar Link Correo electrónico
Artículo AnteriorMurcia anula el programa de la lengua árabe y cultura marroquí tras la presión de Vox
Próximo Artículo La Justicia como guillotina: la ofensiva final de Erdogan para decapitar a la oposición turca

Lea También

Una exposición en Washington destaca las identidades artísticas marroquíes y árabes

11 septiembre 2025

Rabat acogerá en octubre la exposición internacional The Golden Brush

11 septiembre 2025

Marruecos, en el crisol del cine: La narrativa femenina como vértice de la paridad y el diálogo global

11 septiembre 2025
Últimas noticias

Rabat: Hammouchi se reúne con la directora general de la Seguridad Interior francesa

12 septiembre 20253 Minutos de Lectura

El homicidio de Charlie Kirk: La caza continúa y la fragilidad democrática de EE.UU. queda al descubierto

12 septiembre 2025

GPC Papier et Carton convierte Mohammedia en un polo industrial con proyección verde y tecnológica

12 septiembre 2025

La Justicia como guillotina: la ofensiva final de Erdogan para decapitar a la oposición turca

12 septiembre 2025

Murcia anula el programa de la lengua árabe y cultura marroquí tras la presión de Vox

12 septiembre 2025

Zapad 2025: Rusia despliega su poderío hacia Occidente, despertando fantasmas y amenazas nucleares

12 septiembre 2025
Síguenos en
  • Facebook
  • Twitter
  • Instagram
  • YouTube
- Marruecom.com - © 2019-2025
  • Quiénes somos

El tipo de arriba y pulse Enter para la búsqueda. Pulse Esc para cancelar.