El ejército de Sudán anunció que sus fuerzas han entrado en el palacio presidencial en el centro de Jartum, marcando un hito significativo en la guerra civil que enfrenta al ejército regular con las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF, por sus siglas en inglés). Este avance representa una victoria simbólica y estratégica para el ejército, que busca recuperar el control de la capital, perdido al inicio del conflicto en 2023. Sin embargo, las RSF han rechazado la afirmación, asegurando que continúan combatiendo en la zona y que han llevado a cabo una «operación relámpago» en el palacio, donde aseguran haber eliminado a decenas de soldados enemigos. Así lo han publicado en sus cuentas de redes sociales en Telegram.
La guerra civil, que cumple dos años, ha sumido a Sudán en la mayor crisis humanitaria del mundo, según la ONU. Al menos 150,000 personas han muerto, 12 millones han huido de sus hogares y más de la mitad del país enfrenta niveles críticos de inseguridad alimentaria. Además, se han documentado atrocidades como violencia sexual masiva, incluida la violación de niños y mujeres como táctica de guerra, y la destrucción deliberada de hospitales, lo que constituye un crimen de guerra según el derecho internacional. No obstante, las RSF han negado las acusaciones de genocidio en Darfur, donde se les acusa de asesinar a miles de civiles y cometer violaciones como parte de una limpieza étnica.
Aunque el ejército ha logrado recuperar áreas clave en el centro de Jartum, incluyendo edificios gubernamentales y su cuartel general, las RSF aún controlan gran parte del país, especialmente en el oeste y zonas al sur del palacio presidencial. Según los reportes de la BBC, la batalla por la capital está lejos de terminar, y se esperan combates intensos mientras el ejército intenta expulsar a los combatientes restantes. Los residentes de Jartum, que han sufrido bajo el control de las RSF, expresan alivio por el avance del ejército, aunque la situación sigue siendo precaria.
Este giro en el conflicto podría redefinir el rumbo de la guerra, pero la estabilidad en Sudán sigue siendo una quimera. Mientras las fuerzas rivales se disputan el control del país, la población civil continúa pagando el precio más alto, atrapada en una crisis humanitaria sin precedentes y que piden una respuesta internacional urgente.
21/03/2025