La expresión latina «mutatis mutandis», que se traduce como ‘cambiando lo que se deba cambiar’, se emplea para indicar que se ha realizado una adaptación o modificación necesaria en una situación para hacer una comparación válida con otra. Según el Diccionario de la lengua española y el Diccionario panhispánico de dudas, es esencial utilizar correctamente esta locución, con una -s al final de cada palabra.

Ejemplos de Uso Incorrecto:
- Ese argumento fue el que, mutatis mutandi, dio lugar a la famosa película.
- El caso de Unamuno es, mutatis mutandi, similar.
- El anexo establece la aplicación, mutatis mutandi, de las reglas.
Estos ejemplos muestran un uso inapropiado al omitir la -s en la segunda palabra de la locución, lo cual es incorrecto y altera el significado y la forma correcta de la frase latina.
Ejemplos de Uso Correcto:
- Ese argumento fue el que, mutatis mutandis, dio lugar a la famosa película.
- El caso de Unamuno es, mutatis mutandis, similar.
- El anexo establece la aplicación, mutatis mutandis, de las reglas.
En estos ejemplos, se respeta la forma adecuada de la locución, asegurando no solo la corrección gramatical sino también la fidelidad al significado original.
Es importante evitar variantes incorrectas como «mutatis mutantis» o «mutatis mutanti», donde se sustituye la -d por una -t o se omite la -s final. Estos errores, aunque menos comunes, también aparecen en algunos textos y deben corregirse para mantener la precisión y el respeto por el uso adecuado del latín en el español.
En conclusión, para mantener la elegancia y la corrección del lenguaje académico o formal, es crucial utilizar «mutatis mutandis» correctamente, respetando su ortografía y aplicándola de manera adecuada en el contexto de comparaciones o adaptaciones necesarias.
15/8/2024