La Unión Europea ha rechazado de manera contundente las declaraciones de dos ministros israelíes de extrema derecha que abogan por la «migración voluntaria» de los palestinos de la Franja de Gaza. Estas controvertidas afirmaciones fueron realizadas el lunes pasado por el ministro de Seguridad Nacional de Israel, Itamar Ben Gvir, y el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich.
En este sentido, Ben-Gvir instó a Israel a “concentrarse en fomentar la migración de los residentes de Gaza», destacando que de esta manera se mantendría un control permanente sobre la Franja. Asimismo, el político también respaldó la reconstrucción de asentamientos judíos en el territorio palestino.
Ante estas declaraciones, los países de la Unión Europea no han tardado en reaccionar, expresando su preocupación y desaprobación total. Así pues, el Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, se refirió a estas afirmaciones, el miércoles, en la red social X (Twitter, anteriormente), considerándolas “incendiarias e irresponsables». «Los desplazamientos forzosos están estrictamente prohibidos como una grave violación del derecho internacional humanitario», añadió.

En esta línea, se ha producido una respuesta similar por parte del resto de países europeos, ya que Reino Unido, Alemania, Francia, España y los Países Bajos también condenaron los llamados a la migración masiva. Concretamente, Francia expresó su desaprobación a través del Ministerio de Asuntos Exteriores, afirmando que cualquier traslado forzado violaría gravemente el derecho internacional, según los Convenios de Ginebra.
Por su parte, el Reino Unido manifestó su firme rechazo a cualquier propuesta de reubicación de los palestinos fuerza de la Franja, subrayando que Gaza es territorio palestino ocupado y será parte del futuro Estado Palestino. Del mismo modo, el Ministerio de Relaciones Exteriores alemán también expresó su oposición, mientras que la población palestina destacó su desacuerdo a cualquier intento de deportación que violara el derecho internacional y redujera el espacio del territorio, considerándolo un desplazamiento ilegal.
Por último, España y Países Bajos también se sumaron las posiciones anteriores, contrariando la idea del posible reasentamiento; coinciden en respaldar la solución de dos estados.
08/01/2024









