
17-01-2020
Ali Najab, un piloto marroquí prisionero del Polisario, publicó sus memorias contando lo que había vivido en las cárceles de Tinduf durante veinticinco años.
El libro titulado “25 ans dans les geôles de Tindouf” de su escritor Ali Najab dejó patente la dolorosa experiencia de un prisionero de guerra durante más de 9125 días de sufrimiento, de tortura y de humillación por parte del Polisario ante la indiferencia de los oficiales de los servicios de seguridad militar de Argelia.
Najab destaca durante la presentación de su obra intitulada “25 ans dans les geôles de Tindouf” (25 años en las cárceles de Tinduf) en la biblioteca nacional del reino de Marruecos que las violaciones ocurrieron en el suelo argelino, a pesar de que Argelia es uno de los Estados signatarios de los Convenios de Ginebra y sus protocolos adicionales que protegen al prisionero de guerra.
El ex – prisionero ha presentado su conmovedor testimonio al público sobre el sufrimiento de las familias, a través de interrogatorios, tortura e insultos. El piloto marroquí ha hecho un trabajo útil al presentar fielmente testimonios de sus colegas, quienes afirman con argumentos precisos que el régimen argelino está librando una guerra contra Marruecos a través del Polisario, que es “una herencia de la era de la Guerra Fría «.

En 1978, después de que su avión fue derribado, el piloto ha sido capturado por el Polisario y transportado luego a Tinduf para someterle luego a un interrogatorio infernal en base del cual pasó 25 años sufriendo una amarga tortura, humillación y todo tipo de trato inhumano.
Además, el autor del libro ha relatado, con amargura, las terribles condiciones de los prisioneros de guerra marroquíes en los campamentos de Lahmada, que vivían descalzos, sucios, pálidos y con perturbaciones mentales.
El ex – prisionero ha lamentado con pesar que «los prisioneros fueron forzados a realizar trabajos forzados y se morían de hambre y, por si fuera poco, privados de agua constantemente, ya que se les negó el tratamiento médico», asimismo, ha señalado que los torturadores practicaban torturas «institucionalizadas».
Es de destacar que Ali Najab de76 años de edad, vio la luz en 1943 en la región de Maghrawah de Taza, cerca del Monte Bouiblán, en el corazón del Medio Atlas. Se unió a la Fuerzas Aéreas reales en 1965 y era uno de los distinguidos pilotos.
Vale la pena decir que, el libro ha arrojado luz sobre los sufrimientos de la familia Najab, al caer su primer sostén cautivado en las manos enemigas a finales de los años setenta.
Por su parte, Jama Baida, el director de los Archivos de Marruecos, ha insistido en la importancia de traducir las memorias del piloto Ali Najab en las lenguas vivas, a saber; árabe, inglés, español y tan adelante…